Que no te lave la cabeza la proganda sectaria mormona. José Smith era un delincuente y falso profeta por eso se armó y se preparó para matar a cuantos pudiera.

¿Qué había mandado Jesucristo?

(Mateo 26:52) “Vuelve tu espada a su lugar, porque todos los que toman la espada perecerán por la espada.

Los delincuentes y asesinos como José Smith no escuchan ni obedecen a Cristo. Por eso, Smith, murió en su lid enfrentándose contra otros criminales como él.

Triste final el del falso profeta, pero es el final de los falsos profetas. Smith murió reventado en el suelo y sus tripas comidas por perros.

Tú obedece a Cristo, no seas como el criminal y falso profeta.

(Hebreos 5:9) [Jesús] vino a ser responsable de la salvación eterna para todos los que le obedecen,