¿Tú sabes lo que pesan las Tablas de la Ley?. ¡Un güevo!. Pues Moisés lo comprobó cuando, bajando del Horeb, se les cayó encima y le “magullaron” los testículos… Por supuesto, cuando decretó el 11º mandamiento, no dijo su “circunstancia”, entre la fuerza de la gravedad, el peso de las tablas y…….. los “magullados”. Cierto que Moisés ya no estaba con Séfora, su mujer… porque eso de ser “profeta” le absorbía las 24 horas del día (o más). Así que… el “incidente” de las Tablas magullando los “dídimos” de Moisés solo queda reflejado en la literatura apócrifa. Desde entonces… todos los que tienen a sus “gemelos” magullados, los tapan bien tapaditos para que quede el asunto en absoluto secreto. Otra cosa sería si la prescripción mosaica fuese con las orejas o la nariz, que es más complicado de tapar…
