
Iniciado por
Elisabet*
Dios no había mandado a los hombres hacer daño ni matar a las personas, pues lo que Dios había mandado realmente a Moisés y al pueblo de Israel son la ley y los mandamientos que Jesucristo enseña en el Evangelio, no los mandatos que están escritos en el Viejo Testamento que fueron abolidos por Jesucristo y que son contrarios a los misericordiosos mandamientos que Jesucristo enseña en el Evangelio.
Y es que la ley de Dios fue cambiada en mentira por la pluma mentirosa de los escribas, como nos dicen los profetas:
Jeremías 8:7-9
'mi pueblo no conoce el juicio del Señor. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley del Señor está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas'
Isaías 24:5-6
'Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, cambiaron los mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno'
No basta con acusar de forma general que algo no es correcto o creíble.
Si lo que denunciamos es algo que está escrito, estamos en la obligación de señalar claramente aquello que es objeto de nuestra acusación, para que los que nos lean puedan centrar el objeto de la denuncia.
Acusar de forma genérica, es tirar la piedra ocultado entre la multitud.
Yo no creo en la Biblia, aunque hay muchas partes a las que nada tengo que oponer. Pero, siguiendo el credo de los creyentes de que toda ella forma una unidad indisoluble (toda ha sido inspirada por Dios), la rechazo en su totalidad, aunque parte de ella sea creíble.
Decir que del Antiguo Testamento es falso todo aquello que no concuerde con los misericordiosos mandamientos de Jesús, es abrir las puertas a una serie de opiniones diversas (e incluso, opuestas).
El mandamiento de amar al prójimo ha servido de sostén y base para cosas terribles a lo largo de la historia, porque no todos interpretamos lo mismo.
Si alguien cuestionara esto último que digo, que lo manifieste, y le daré pruebas.
La Verdad nos hará libres.