ese autor espanol es agnostico y ha reescrito el pensamiento de Pablo, no sorprende que diga esas cosas.
Hoy en dia tambien la ley impede que la gente se una en una esquina de barrio a charlar.. pero no ves a nadie arrestado por eso. Seguro que Roma, tenia cosas mas importantes que atender que a un grupo de envidiosos del Mesias.