Jesús prometió a sus apóstoles que regresaría a por ellos.
Jesús aseguró que regresaría antes de que pasara su generación.
Sus apóstoles creyeron firmemente que esto iba a suceder así.
Sus apóstoles murieron y Jesús no regresó.
Sus contemporáneos murieron y Jesús no regresó.
Esta segunda venida figura escrita en sus Libros sagrados.
Esto es una evidencia de que el Cristianismo es una burda mentira.