Por otro lado, en Rom. 8:26, donde algunas versiones bíblicas dicen que el espíritu santo "intercede" (o: "aboga") por los ungidos, la idea está mal comprendida debido a una traducción inexacta. La palabra traducida "intercede" (o "aboga") viene de un verbo griego que se usa en dos lugares del NT ... ahí en Rom. 8:26 y aquí en este otro lugar:
Luc. 10:40 Pero Marta estaba distraída encargándose de muchas tareas. De modo que se acercó a él y le dijo: “Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para preparar todo? Dile que venga y me ayude”.
Para quien no conozca ese relato, se trata de Jesús en casa de Lázaro y hablando de las cosas del reino. Mientras María, una de las hermanas escuchaba a Jesús, Marta, la otra hermana, preparaba algo de comer ... así que se quejaba con Jesús de que su hermana no la estuviera ayudando en los quehaceres en la cocina.
De ese relato puede entenderse claramente que el verbo griego συναντιλαμβάνομαι que es el que se traduce incorrectamente "interceder" (o: "abogar") significa más bien "cooperar, ayudar". Por eso en la TNM2019, Rom. 8:26 se traduce de la siguiente manera:
Rom. 8:26 De igual manera, el espíritu también acude en nuestra ayuda cuando estamos débiles. Porque el problema es que a veces no sabemos lo que necesitamos pedir en oración, pero el espíritu mismo ruega por nosotros con lamentos no expresados.
Traducido de esa manera, comprendemos mejor el lenguaje figurado de la acción que realiza el espíritu santo en un ungido: NO ES interceder, ni abogar ... sino cooperar, ayudarlo a llevar sus cargas ... y eso lo hace de muchas maneras, pues el espíritu de Dios es una fuerza muy poderosa.
Última edición por Eli_yahu; 09-jun.-2020 a las 10:16
2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.