¿Se terminan las discusiones?
¿Y ahora que va a ser de mí?
He renegado de mi pasado con lo que me he ganado el odio de mis antiguos "camaradas" y por el otro lado los Honorables no me aceptaron.
¡Ay de mí!
Con tan grande intelecto y carisma el mundo es tuyo.
Hay que ponerle el pecho a las balas. Dios les bendiga.