Dios no tiene madre, Él es el creador, es antes que nada y que nadie.

María es la madre del Señor, es una mujer que merece nuestro respeto e incluso admiración. Ahora, en cuanto a si esta puede interceder delante de Dios por el resto de los mortales, la respuesta es NO.

Que lo hiciera en los días en que compartió tiempo y espacio con el Señor en el planeta, no es garantía de que pueda hacerlo siempre. El único mediador entre el hombre y Dios es Cristo.