Los gobiernos humanos no van a acabar con la pobreza ... ni los religiosos que pretenden arreglar el mundo con sus teologías revolucionarias. Si a los cristianos se les enseñó a compartir y ayudar, no fue con la intención de cambiar el mundo, sino con la intención de ayudarse mutuamente y mostrar las buenas cualidades de un verdadero cristiano. Un cristiano de verdad no se entromete en los esfuerzos humanos para cambiar los sistemas políticos de este mundo que no es de Dios, porque sabe con certeza que la única solución para los problemas humanos es el Reino de Dios ... una buena noticia que Uds nunca predican.