Un imperio (del latín imperium) es,
en los términos más rigurosos,
un Estado multinacional, multireligioso y multiétnico que consiguió al menos parte de su territorio por conquistas de anexión. También se puede referir a un estado a cuyo frente está el Emperador. Por extensión, "imperio" puede referirse también a
la etapa histórica donde una etnia o nación, desarrolló una política imperial o bien a la potencia que ejerce el poder imperial.
Actualmente hay una tendencia a un uso muy laxo del término para aplicar el término imperio no sólo un Estado que abarca varias naciones étnicas, sino a todo Estado que
influye sobre la soberanía de otros Estados, no solo aprovechándose de ellos, en el sentido del colonialismo inglés, francés, holandés, entre otros; o designando sus gobiernos, sino conformándolos según su propia imagen. Así, podrían interpretarse a los Estados Unidos y a la extinta Unión Soviética como imperios,
a pesar de no conquistar físicamente territorios.
En el siglo XX el término imperialismo adquirió la connotación peyorativa que actualmente tiene, en parte gracias a Lenin, quien en su libro El imperialismo: la fase superior del capitalismo, decía:

Iniciado por
Lenin
“En esta obra hemos probado que la guerra de 1914-1918 ha sido, de ambos lados beligerantes, una guerra imperialista (esto es, una guerra de conquista, de bandidaje y de robo), una guerra por el reparto del mundo, por la partición y el nuevo reparto de las colonias, de las "esferas de influencia" del capital financiero, etc.”