
Iniciado por
Socorp
Hola:
Terminé de leer todo y de entenderlo. Muy bueno; excelente trabajo. Opino algo porque no me gusta estar callado.
Si recordamos que la teoría del big bang fue propuesta por un sacerdote, al cual Eisntein reconoció como excelente cientìfico, no es impensable que la teología y la ciencia puedan filosofar juntos. Uno propone las preguntas y el otro las responde.
Stephen Hawking puede estar equivocado porque es un ser humano y el error està incluido en el normal funcionamiento de la mente humana. El estar equivocado, “el error”, està contemplado como “normal”, porque sinò, la selección natural lo habrìa eliminado o nos habrìa eliminado a nosotros. Por eso, aun asi, Hawking sigue siendo un grande.
La pequeña mente humana no puede entender otra forma de vida o de inteligencia que aquella a las cuales està acostumbrado. Muchas veces sucede que un nuevo ser vivo, descubierto en los abismos del mar, no se lo vea como natural sino como una creación gràfica de un computer. Cuesta creer que sea un habitante de nuestro planeta porque no entra en los cànones de vida conocidos por nosotros. Con la mente sucede lo mismo; no se puede imaginar otra manera de pensar que aquella que funciona en nuestro cerebro.
Con la misma infantil credulidad, la mente se asombra de las estrellas fugaces y los cometas y ni piensa que 15.000 millones de años de vida del Universo es un numero espantosamente grande. Sòlo contar desde uno hasta 15.000 millones nos llevarìa màs de dos siglos; màs de dos generaciones contando. Y sin embargo no es asombroso para una mente humana; se asombra por zonceras.
¿No sé si has leído mi post sobre el Budismo? En efecto, Siddhartha explica còmo todo es un ciclo continuo. El ejemplo que usa es el del rio que llega a su destino y retorna, hecho vapor, para recomenzar. El rio parece siempre el mismo pero es siempre diverso. La visión panteísta de Budismo es sorprendente; es una religión sin dioses.
Cada persona tiene su concepción mental del Universo. Cada religión da su versión de los orígenes y la ciencia hace lo mismo. Los ateos no tienen ninguna visión y siguen férreamente, aunque sin entender, las propuestas de la ciencia que son cambiantes en un parpadeo: hoy es asì y mañana es distinto. Es el peligroso "cientifismo"; aunque a ellos no les guste esa palabra.
por cierto que pertenecemos como un simple grànulo, una parte del polvo estelar. Lo que no logramos, como bien dices, es que tomemos conciencia de esto debido a las limitaciones naturales de nuestra mente.
Cierto que Carl Sagàn era un grande también en filosofìa.
Saludos.