Cita Iniciado por Roberto0 Ver Mensaje
Hay sangre y hay Pacto, la sangre que sella el pacto, son los misericordiosos mandamientos dados por Dios y enseñados por Jesucristo.

(Revelación 1:5)
y de Jesucristo,
y que nos desató de nuestros pecados
por medio de su propia sangre


(1 Juan 1:7)
La sangre de Jesús su Hijo
nos limpia de todo pecado.