Voces del pasado

[Jandulilay]

La Serpiente no fue culpable de que Jehová creara a dos seres gilipollas. Para ser inmortales les bastaba comer del árbol de la vida.

Aunque, a decir verdad, este cuento trata de dos inocentes que se las tuvieron que ver con un tahúr.

Adán tomó una decisión voluntaria, sabiendo lo que les ocurriría. El mandato de Dios a Adán cuando no tenía compañera fue este:

"Jehová Dios procedió a tomar al hombre y a establecerlo en el jardín de Edén para que lo cultivara y lo cuidara. Y también impuso Jehová Dios este mandato al hombre: De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás. Génesis 2:15-17

Así que el mandato se lo transmitió Adán a su compañera Eva. Según la Biblia Eva fue engañada, pero Adán no. El diálogo que tuvieron Adán y Eva para que Adán decidiera comer de ese fruto no lo sabemos,pero sí sabemos que Adán lo comió.