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Tema: ... NAVIDAD - 25 de Diciembre - TELESFORO y SEXTO JULIO AFRICANO...

  1. #361
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    Cita Iniciado por Roberto0 Ver Mensaje
    Mejor respeta como está escrito que lo sabe todo el mundo que es así no vengas tú ahora a cambiar las cosas porque a ti no te guste.
    ¿Cuál hay que respetar la de Mateo, la de Lucas, la de Marcos o la de Juan? ... todas son distintas.

    Según San Mateo (26:47-54)

    Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes y por los ancianos del pueblo. El que le entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es: prendedlo». Y enseguida se acercó a Jesús y le dijo: —Salve, Rabbí —y le besó. Pero Jesús le dijo: —Amigo, ¡haz lo que has venido a hacer! Entonces, se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron. De pronto, uno de los que estaban con Jesús se llevó la mano a la espada, la desenvainó, e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja. Entonces le dijo Jesús: —Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que recurren a la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo acudir a mi Padre y al instante pondría a mi disposición más de doce legiones de ángeles? Entonces, ¿cómo se van a cumplir las Escrituras, según las cuales tiene que suceder así? En aquel momento le dijo Jesús a la gente: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y no me prendisteis. Todo esto sucedió para que se cumplieran las Escrituras de los Profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


    Según San Marcos (14:43-52)


    Todavía estaba hablando, cuando de repente llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos. El que lo entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es; prendedlo y llevadlo bien custodiado». Y nada más llegar se acercó y le dijo: —Rabbí —y le besó. Entonces le echaron mano y lo apresaron. Pero uno de los que le rodeaban, desenvainando la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja. En respuesta Jesús les dijo: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días estaba entre vosotros en el Templo enseñando, y no me prendisteis. Pero que así se cumplan las Escrituras. Entonces, lo abandonaron y huyeron todos. Y un joven, que se cubría el cuerpo tan sólo con una sábana, le seguía. Y lo agarraron. Pero él, soltando la sábana, se escapó desnudo.


    Según San Lucas (22:47-53)

    Todavía estaba hablando, cuando de pronto llegó un tropel de gente. El que se llamaba Judas, uno de los doce, los precedía y se acercó a Jesús para besarle. Jesús le dijo: —Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! — y tocándole la oreja, lo curó. Dijo después Jesús a los que habían venido contra él, príncipes de los sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos? Mientras estaba con vosotros todos los días en el Templo, no alzasteis las manos contra mí. Pero ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas.


    Según San Juan (18:1-12)

    Dicho esto, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto en el que entraron él y sus discípulos. Judas, el que le iba a entregar, conocía el lugar, porque Jesús se reunía frecuentemente allí con sus discípulos. Entonces Judas se llevó con él a la cohorte y a los servidores de los príncipes de los sacerdotes y de los fariseos, y llegaron allí con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: «Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: —¿A quién buscáis? — A Jesús el Nazareno —respondieron ellos. Jesús contestó: —Os he dicho que yo soy; si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumplió la palabra que había dicho: «No he perdido a ninguno de los que me diste». Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. El criado se llamaba Malco. Jesús le dijo a Pedro:—Envaina tu espada. ¿Acaso no voy a beber el cáliz que el Padre me ha dado? Entonces la cohorte, el tribuno y los servidores de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.
    Última edición por Loma_P; 15-dic.-2023 a las 03:52

  2. #362
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    Cita Iniciado por Loma_P Ver Mensaje
    Estaría bien que nos dijeseis el porqué cada evangelio lo cuenta a su manera un mismo hecho.

    ¿Que le curó? eso de dónde te lo sacas Elisabet?

    Te dije que tú misma lo recordaste:


    Cita Iniciado por Elisabet* Ver Mensaje

    Tú misma lo has recordado:

    Según San Lucas (22:47-53)

    ...Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! —y tocándole la oreja, lo curó.

    Cita Iniciado por Loma_P Ver Mensaje
    Sólo el tal Lucas, ni Juan, ni Mateo ni Marcos.

    Decía que ya ves que no me lo inventé. Pero también hay algo importante:

    lo siguiente nos da una enseñanza. ¿Cómo es que cayeron en tierra cuando Jesús dijo Yo Soy?:

    Según San Juan (18:1-12)
    ...Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra...

    V no lo ignores, esto parece muy revelador.
    Última edición por Elisabet*; 15-dic.-2023 a las 04:53

  3. #363
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    Cita Iniciado por Elisabet* Ver Mensaje

    Te dije que tú misma lo recordaste:







    Decía que ya ves que no me lo inventé. Pero también hay algo importante:

    lo siguiente nos da una enseñanza. ¿Cómo es que cayeron en tierra cuando Jesús dijo Yo Soy?:

    Según San Juan (18:1-12)
    ...Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra...

    V no lo ignores, esto parece muy revelador.
    [/QUOTE]

    ¡¡Aclaraté!! ¿Qué versión tenemos o quieres que nos creamos? la de Mateo, la de Marcos, la de Lucas o la de Juan. Las ensaladas no me valen.

    Según San Mateo (26:47-54)

    Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes y por los ancianos del pueblo. El que le entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es: prendedlo». Y enseguida se acercó a Jesús y le dijo: —Salve, Rabbí —y le besó. Pero Jesús le dijo: —Amigo, ¡haz lo que has venido a hacer! Entonces, se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron. De pronto, uno de los que estaban con Jesús se llevó la mano a la espada, la desenvainó, e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja. Entonces le dijo Jesús: —Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que recurren a la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo acudir a mi Padre y al instante pondría a mi disposición más de doce legiones de ángeles? Entonces, ¿cómo se van a cumplir las Escrituras, según las cuales tiene que suceder así? En aquel momento le dijo Jesús a la gente: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y no me prendisteis. Todo esto sucedió para que se cumplieran las Escrituras de los Profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


    Según San Marcos (14:43-52)


    Todavía estaba hablando, cuando de repente llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos. El que lo entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es; prendedlo y llevadlo bien custodiado». Y nada más llegar se acercó y le dijo: —Rabbí —y le besó. Entonces le echaron mano y lo apresaron. Pero uno de los que le rodeaban, desenvainando la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja. En respuesta Jesús les dijo: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días estaba entre vosotros en el Templo enseñando, y no me prendisteis. Pero que así se cumplan las Escrituras. Entonces, lo abandonaron y huyeron todos. Y un joven, que se cubría el cuerpo tan sólo con una sábana, le seguía. Y lo agarraron. Pero él, soltando la sábana, se escapó desnudo.


    Según San Lucas (22:47-53)

    Todavía estaba hablando, cuando de pronto llegó un tropel de gente. El que se llamaba Judas, uno de los doce, los precedía y se acercó a Jesús para besarle. Jesús le dijo: —Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! — y tocándole la oreja, lo curó. Dijo después Jesús a los que habían venido contra él, príncipes de los sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos? Mientras estaba con vosotros todos los días en el Templo, no alzasteis las manos contra mí. Pero ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas.


    Según San Juan (18:1-12)

    Dicho esto, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto en el que entraron él y sus discípulos. Judas, el que le iba a entregar, conocía el lugar, porque Jesús se reunía frecuentemente allí con sus discípulos. Entonces Judas se llevó con él a la cohorte y a los servidores de los príncipes de los sacerdotes y de los fariseos, y llegaron allí con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: «Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: —¿A quién buscáis? — A Jesús el Nazareno —respondieron ellos. Jesús contestó: —Os he dicho que yo soy; si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumplió la palabra que había dicho: «No he perdido a ninguno de los que me diste». Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. El criado se llamaba Malco. Jesús le dijo a Pedro:—Envaina tu espada. ¿Acaso no voy a beber el cáliz que el Padre me ha dado? Entonces la cohorte, el tribuno y los servidores de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.

  4. #364
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    ¡¡Aclaraté!! ¿Qué versión tenemos o quieres que nos creamos? la de Mateo, la de Marcos, la de Lucas o la de Juan. Las ensaladas no me valen.

    Según San Mateo (26:47-54)

    Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes y por los ancianos del pueblo. El que le entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es: prendedlo». Y enseguida se acercó a Jesús y le dijo: —Salve, Rabbí —y le besó. Pero Jesús le dijo: —Amigo, ¡haz lo que has venido a hacer! Entonces, se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron. De pronto, uno de los que estaban con Jesús se llevó la mano a la espada, la desenvainó, e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja. Entonces le dijo Jesús: —Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que recurren a la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo acudir a mi Padre y al instante pondría a mi disposición más de doce legiones de ángeles? Entonces, ¿cómo se van a cumplir las Escrituras, según las cuales tiene que suceder así? En aquel momento le dijo Jesús a la gente: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y no me prendisteis. Todo esto sucedió para que se cumplieran las Escrituras de los Profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


    Según San Marcos (14:43-52)


    Todavía estaba hablando, cuando de repente llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos. El que lo entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es; prendedlo y llevadlo bien custodiado». Y nada más llegar se acercó y le dijo: —Rabbí —y le besó. Entonces le echaron mano y lo apresaron. Pero uno de los que le rodeaban, desenvainando la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja. En respuesta Jesús les dijo: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días estaba entre vosotros en el Templo enseñando, y no me prendisteis. Pero que así se cumplan las Escrituras. Entonces, lo abandonaron y huyeron todos. Y un joven, que se cubría el cuerpo tan sólo con una sábana, le seguía. Y lo agarraron. Pero él, soltando la sábana, se escapó desnudo.


    Según San Lucas (22:47-53)

    Todavía estaba hablando, cuando de pronto llegó un tropel de gente. El que se llamaba Judas, uno de los doce, los precedía y se acercó a Jesús para besarle. Jesús le dijo: —Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! — y tocándole la oreja, lo curó. Dijo después Jesús a los que habían venido contra él, príncipes de los sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos? Mientras estaba con vosotros todos los días en el Templo, no alzasteis las manos contra mí. Pero ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas.


    Según San Juan (18:1-12)

    Dicho esto, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto en el que entraron él y sus discípulos. Judas, el que le iba a entregar, conocía el lugar, porque Jesús se reunía frecuentemente allí con sus discípulos. Entonces Judas se llevó con él a la cohorte y a los servidores de los príncipes de los sacerdotes y de los fariseos, y llegaron allí con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: «Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: —¿A quién buscáis? — A Jesús el Nazareno —respondieron ellos. Jesús contestó: —Os he dicho que yo soy; si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumplió la palabra que había dicho: «No he perdido a ninguno de los que me diste». Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. El criado se llamaba Malco. Jesús le dijo a Pedro:—Envaina tu espada. ¿Acaso no voy a beber el cáliz que el Padre me ha dado? Entonces la cohorte, el tribuno y los servidores de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.[/QUOTE]

    "Jesús, pues, sabiendo todas las cosas que iban a sobrevenirle, salió y les dijo:
    ¿A quién buscan?. Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Les dijo: soy yo. Y Judas, el que lo traicionaba, también estaba con ellos. Sin embargo, cuando él les dijo: soy yo, retrocedieron y cayeron en tierra. Por eso les preguntó otra vez: ¿A quién buscan?. Dijeron: A Jesús el Nazareno. Jesús contestó: Les dije que soy yo. Por lo tanto, si es a mí a quien buscan, dejen ir a estos" Juan 18:4-8

    Jesús sabiendo lo que le esperaba de acuerdo con la voluntad de su Padre les dijo "soy yo" su porte revela tanta serenidad y valentía que los hombres retroceden asombrados y caen al suelo, y quizás Dios hizo algo para que les impusiera respeto y asombro a los enemigos de Jesús, el caso es que recularon y cayeron al suelo
    Última edición por Jandulilay; 15-dic.-2023 a las 04:47

  5. #365
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    ¡¡Aclaraté!! ¿Qué versión tenemos o quieres que nos creamos? la de Mateo, la de Marcos, la de Lucas o la de Juan. Las ensaladas no me valen.

    Según San Mateo (26:47-54)

    Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes y por los ancianos del pueblo. El que le entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es: prendedlo». Y enseguida se acercó a Jesús y le dijo: —Salve, Rabbí —y le besó. Pero Jesús le dijo: —Amigo, ¡haz lo que has venido a hacer! Entonces, se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron. De pronto, uno de los que estaban con Jesús se llevó la mano a la espada, la desenvainó, e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja. Entonces le dijo Jesús: —Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que recurren a la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo acudir a mi Padre y al instante pondría a mi disposición más de doce legiones de ángeles? Entonces, ¿cómo se van a cumplir las Escrituras, según las cuales tiene que suceder así? En aquel momento le dijo Jesús a la gente: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y no me prendisteis. Todo esto sucedió para que se cumplieran las Escrituras de los Profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


    Según San Marcos (14:43-52)


    Todavía estaba hablando, cuando de repente llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos. El que lo entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es; prendedlo y llevadlo bien custodiado». Y nada más llegar se acercó y le dijo: —Rabbí —y le besó. Entonces le echaron mano y lo apresaron. Pero uno de los que le rodeaban, desenvainando la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja. En respuesta Jesús les dijo: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días estaba entre vosotros en el Templo enseñando, y no me prendisteis. Pero que así se cumplan las Escrituras. Entonces, lo abandonaron y huyeron todos. Y un joven, que se cubría el cuerpo tan sólo con una sábana, le seguía. Y lo agarraron. Pero él, soltando la sábana, se escapó desnudo.


    Según San Lucas (22:47-53)

    Todavía estaba hablando, cuando de pronto llegó un tropel de gente. El que se llamaba Judas, uno de los doce, los precedía y se acercó a Jesús para besarle. Jesús le dijo: —Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! — y tocándole la oreja, lo curó. Dijo después Jesús a los que habían venido contra él, príncipes de los sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos? Mientras estaba con vosotros todos los días en el Templo, no alzasteis las manos contra mí. Pero ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas.


    Según San Juan (18:1-12)

    Dicho esto, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto en el que entraron él y sus discípulos. Judas, el que le iba a entregar, conocía el lugar, porque Jesús se reunía frecuentemente allí con sus discípulos. Entonces Judas se llevó con él a la cohorte y a los servidores de los príncipes de los sacerdotes y de los fariseos, y llegaron allí con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: «Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: —¿A quién buscáis? — A Jesús el Nazareno —respondieron ellos. Jesús contestó: —Os he dicho que yo soy; si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumplió la palabra que había dicho: «No he perdido a ninguno de los que me diste». Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. El criado se llamaba Malco. Jesús le dijo a Pedro:—Envaina tu espada. ¿Acaso no voy a beber el cáliz que el Padre me ha dado? Entonces la cohorte, el tribuno y los servidores de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.
    "Jesús, pues, sabiendo todas las cosas que iban a sobrevenirle, salió y les dijo:
    ¿A quién buscan?. Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Les dijo: soy yo. Y Judas, el que lo traicionaba, también estaba con ellos. Sin embargo, cuando él les dijo: soy yo, retrocedieron y cayeron en tierra. Por eso les preguntó otra vez: ¿A quién buscan?. Dijeron: A Jesús el Nazareno. Jesús contestó: Les dije que soy yo. Por lo tanto, si es a mí a quien buscan, dejen ir a estos" Juan 18:4-8

    Jesús sabiendo lo que le esperaba de acuerdo con la voluntad de su Padre les dijo "soy yo" su porte revela tanta serenidad y valentía que los hombres retroceden asombrados y caen al suelo, y quizás Dios hizo algo para que les impusiera respeto y asombro a los enemigos de Jesús, el caso es que recularon y cayeron al suelo
    [/QUOTE]

  6. #366
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    Cita Iniciado por Jandulilay Ver Mensaje
    "Jesús, pues, sabiendo todas las cosas que iban a sobrevenirle, salió y les dijo:
    ¿A quién buscan?. Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Les dijo: soy yo. Y Judas, el que lo traicionaba, también estaba con ellos. Sin embargo, cuando él les dijo: soy yo, retrocedieron y cayeron en tierra. Por eso les preguntó otra vez: ¿A quién buscan?. Dijeron: A Jesús el Nazareno. Jesús contestó: Les dije que soy yo. Por lo tanto, si es a mí a quien buscan, dejen ir a estos" Juan 18:4-8

    Jesús sabiendo lo que le esperaba de acuerdo con la voluntad de su Padre les dijo "soy yo" su porte revela tanta serenidad y valentía que los hombres retroceden asombrados y caen al suelo, y quizás Dios hizo algo para que les impusiera respeto y asombro a los enemigos de Jesús, el caso es que recularon y cayeron al suelo
    [/QUOTE]


    Ese es el tipo de "registro histórico" que carece de todo valor.
    Ya estaría bueno que comiences a distinguir entre realidad y fantasía.
    .
    Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.

  7. #367
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    Ese es el tipo de "registro histórico" que carece de todo valor.
    Ya estaría bueno que comiences a distinguir entre realidad y fantasía.
    .[/QUOTE]

    Te entiendo doonga, pero sigues sin reconocer el hecho histórico del comienzo de que Jesús ha dado su vida por la humanidad. Y aunque tú y millones de personas no lo reconozcan no deja de ser una verdad histórica.
    Solamente no lo reconocen y lo niegan los que no estuvieron allí ese día.

  8. #368
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    Cita Iniciado por Doonga Ver Mensaje

    Ese es el tipo de "registro histórico" que carece de todo valor.
    Ya estaría bueno que comiences a distinguir entre realidad y fantasía.
    .
    Cita Iniciado por Jandulilay Ver Mensaje
    Te entiendo doonga, pero sigues sin reconocer el hecho histórico del comienzo de que Jesús ha dado su vida por la humanidad. Y aunque tú y millones de personas no lo reconozcan no deja de ser una verdad histórica.
    Solamente no lo reconocen y lo niegan los que no estuvieron allí ese día.

    El hecho histórico de la existencia de Jesús nunca lo he negado.
    El hecho de que Jesús haya sido condenado y matado por los romanos es cuestionable.

    El hecho de que Jesús "ha dado su vida por la humanidad"
    no es ninguna verdad histórica. Por el contrario, es un pedo de culebra muy hediondo, que forma parte del imaginario inventado por Pablo de Tarso.




    Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.

  9. #369
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    Cita Iniciado por doonga Ver Mensaje

    El hecho histórico de la existencia de Jesús nunca lo he negado.
    El hecho de que Jesús haya sido condenado y matado por los romanos es cuestionable.

    El hecho de que Jesús "ha dado su vida por la humanidad"
    no es ninguna verdad histórica. Por el contrario, es un pedo de culebra muy hediondo, que forma parte del imaginario inventado por Pablo de Tarso.




    Pues te equivocas.
    Jesucristo es Dios, y es Jesús de Nazaret y ya conoces su historia así que no intentes cambiarla.

  10. #370
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    ¡¡Aclaraté!! ¿Qué versión tenemos o quieres que nos creamos? la de Mateo, la de Marcos, la de Lucas o la de Juan. Las ensaladas no me valen.

    Según San Mateo (26:47-54)

    Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes y por los ancianos del pueblo. El que le entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es: prendedlo». Y enseguida se acercó a Jesús y le dijo: —Salve, Rabbí —y le besó. Pero Jesús le dijo: —Amigo, ¡haz lo que has venido a hacer! Entonces, se acercaron, echaron mano a Jesús y lo apresaron. De pronto, uno de los que estaban con Jesús se llevó la mano a la espada, la desenvainó, e hirió al criado del sumo sacerdote, cortándole la oreja. Entonces le dijo Jesús: —Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que recurren a la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo acudir a mi Padre y al instante pondría a mi disposición más de doce legiones de ángeles? Entonces, ¿cómo se van a cumplir las Escrituras, según las cuales tiene que suceder así? En aquel momento le dijo Jesús a la gente: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo, y no me prendisteis. Todo esto sucedió para que se cumplieran las Escrituras de los Profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


    Según San Marcos (14:43-52)


    Todavía estaba hablando, cuando de repente llegó Judas, uno de los doce, acompañado de un tropel de gente con espadas y palos, enviados por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos. El que lo entregó les había dado esta señal: «Al que yo bese, ése es; prendedlo y llevadlo bien custodiado». Y nada más llegar se acercó y le dijo: —Rabbí —y le besó. Entonces le echaron mano y lo apresaron. Pero uno de los que le rodeaban, desenvainando la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja. En respuesta Jesús les dijo: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos a prenderme? Todos los días estaba entre vosotros en el Templo enseñando, y no me prendisteis. Pero que así se cumplan las Escrituras. Entonces, lo abandonaron y huyeron todos. Y un joven, que se cubría el cuerpo tan sólo con una sábana, le seguía. Y lo agarraron. Pero él, soltando la sábana, se escapó desnudo.


    Según San Lucas (22:47-53)

    Todavía estaba hablando, cuando de pronto llegó un tropel de gente. El que se llamaba Judas, uno de los doce, los precedía y se acercó a Jesús para besarle. Jesús le dijo: —Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre? Los que estaban a su alrededor, al ver lo que iba a suceder, dijeron: —Señor, ¿atacamos con la espada? Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Pero Jesús, en respuesta, dijo: —¡Dejadlo ya! — y tocándole la oreja, lo curó. Dijo después Jesús a los que habían venido contra él, príncipes de los sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos: —¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos? Mientras estaba con vosotros todos los días en el Templo, no alzasteis las manos contra mí. Pero ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas.


    Según San Juan (18:1-12)

    Dicho esto, salió Jesús con sus discípulos al otro lado del torrente Cedrón, donde había un huerto en el que entraron él y sus discípulos. Judas, el que le iba a entregar, conocía el lugar, porque Jesús se reunía frecuentemente allí con sus discípulos. Entonces Judas se llevó con él a la cohorte y a los servidores de los príncipes de los sacerdotes y de los fariseos, y llegaron allí con linternas, antorchas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a ocurrir, se adelantó y les dijo: —¿A quién buscáis? —A Jesús el Nazareno —le respondieron. Jesús les contestó: —Yo soy. Judas, el que le iba a entregar, estaba con ellos. Cuando les dijo: «Yo soy», se echaron hacia atrás y cayeron en tierra. Les preguntó de nuevo: —¿A quién buscáis? — A Jesús el Nazareno —respondieron ellos. Jesús contestó: —Os he dicho que yo soy; si me buscáis a mí, dejad marchar a éstos. Así se cumplió la palabra que había dicho: «No he perdido a ninguno de los que me diste». Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó, hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. El criado se llamaba Malco. Jesús le dijo a Pedro:—Envaina tu espada. ¿Acaso no voy a beber el cáliz que el Padre me ha dado? Entonces la cohorte, el tribuno y los servidores de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.


    Cita Iniciado por Jandulilay Ver Mensaje
    "Jesús, pues, sabiendo todas las cosas que iban a sobrevenirle, salió y les dijo:
    ¿A quién buscan?. Le contestaron: A Jesús el Nazareno. Les dijo: soy yo. Y Judas, el que lo traicionaba, también estaba con ellos. Sin embargo, cuando él les dijo: soy yo, retrocedieron y cayeron en tierra. Por eso les preguntó otra vez: ¿A quién buscan?. Dijeron: A Jesús el Nazareno. Jesús contestó: Les dije que soy yo. Por lo tanto, si es a mí a quien buscan, dejen ir a estos" Juan 18:4-8

    Jesús sabiendo lo que le esperaba de acuerdo con la voluntad de su Padre les dijo "soy yo" su porte revela tanta serenidad y valentía que los hombres retroceden asombrados y caen al suelo, y quizás Dios hizo algo para que les impusiera respeto y asombro a los enemigos de Jesús, el caso es que recularon y cayeron al suelo
    ¡¡Más versiones sobre lo mismo!!

    En la tuya Jandulilay ciertamente desconozco para que pagaron y llevaron a Judas porque con preguntar ya habían tenido bastante, pero como es muchísimo más nueva y ya se habían percatado de los patinazos anteriores entre los evangelistas pues no dicen si eran el populacho, una cohorte romana, los sacerdotes judíos o quién o quiénes fueron a apresarlo, tampoco los apóstoles huyeron resultaba más de machote que jesús pidiera clemencia para sus apóstoles aún cuando uno había cortado una oreja.

    Necesitamos más cristianos que nos pongan sus distintas versiones ¡¡animaros!!.

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