El mismo Jesucristo mandó a sus discípulos que hicieran discípulos a todas las naciones enseñándoles a guardar todas las cosas que Él les había mandado.
Y entre las cosas que Jesucristo les había mandado a sus discípulos, está incluido predicar el Evangelio por todo el mundo, y hacer discípulos a todas las naciones enseñándoles a guardar todas las cosas que Jesucristo les había mandado.