Hola.
Llegado a éste punto pienso que no tengo mucho más que agregar, aunque en cuanto a relato sí pudiera contar algunas cosas más y dar detalles de otras ya contadas.
El tema, como explica el mismo título, es sobre Dios, como dice "¿Quién es Dios?". Me parece que a lo largo del tema, y desde el mismo primer comentario, esa pregunta fue abordada y respondida.
Luego, el testimonio de oración es presentado tanto en el mismo primer post como en los siguientes relatos, especialmente en la parte final de los que están en la página 3 (usuarios conectados o miembros del foro) o página 6 (usuarios desconectados o visitantes).
Por tanto, considerando lo antes mencionado pienso que ya he cumplido con presentar el tema exponiendo mis creencias de una forma bastante clara. En ningún momento intento mentir o engañar a nadie, mi testimonio sobre Dios es verdad, el Padre es el Dios de Abraham, de Yisaac y de Yiacob, y Yiesou es su hijo. Tampoco los relatos tienen intención de engañar, aunque sí de captar la atención contando cosas que realmente me han sucedido, pero que no son el centro del tema.
En resumen:
- Dios es el Padre.
- Su hijo se llama Yiesou.
- Yiesou es el verdadero ungido de Yisrael.
- Yiesou murió y resucitó al tercer día.
- Subió al cielo y se sentó a la derecha de Dios (me parece que me ha faltado hablar sobre ésto).
- Yiesou volverá y éste mundo acabará.
Así pues, es posible que esté dando por culminada mi participación en el tema, aunque quiero expresar que si tienen preguntas sobre mis creencias yo, si Dios quiere, estaré para contestar.
Posiblemente intervenga en algunos post más hasta que vaya dejando el tema.
Saludos y bendiciones.
Después de las experiencias que relato me queda claro que la biblia contiene la Palabra de Dios, y Dios siempre dice la verdad.
Las escrituras hablan de una sola religión verdadera, así como de un único Dios verdadero.
Una de las cosas que ocurrieron fue que se me estuvo llevando a pensar que todas las religiones llamadas "cristianas" eran del agrado de Dios. Nada más alejado de la verdad. Solo hay una religión verdadera, una sola enseñanza válida, todas las demás son cosa mala.
La biblia nos dice claramente que debemos apartarnos del mal.
A mi se me trató de incitar a pensar de que a Dios no le molestaba la gente que practicaba el mal, como los idólatras, los adúlteros, los gay, los brujos, que igual se iban a salvar. Algo totalmente falso según toda la escritura.
La biblia deja claro que Dios odia el mal, y va a castigar, como ya ha castigado a los que se complacen con el mal.
También se me incitó a pensar que había comunión entre la luz y las tinieblas, que Dios amaba a los malos, como al Satán, quizás llevándome a pensar que Dios no odia a ninguna criatura. Pero Dios odia, incluso a criaturas, y la biblia lo dice claramente desde su primer libro.
Saludos y bendiciones a mis hermanos, a los dudosos y a los incrédulos.
Cada cual con sus creencias.
Mientras los creyentes estén conscientes de que sus creencias son creencias, está todo bien.
Pero cuando los creyentes se creen portadores de La Verdad, ahí estamos mal.
Los creyentes que se creen portadores de la verdad han causado de los peores crímenes que ha visto la humanidad,
crímenes cometidos en el nombre "La verdad" que creen que portan.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Tener certeza no es equivalente a creerse portador de la verdad. Quién se cree portador de la verdad no se cuestiona.
Yo tengo certeza que que no es posible acceder a La Verdad.
Y las certezas respecto a las vivencias diarias están sujetas a revisión, al menos por mi parte.
Porque, al contrario de los creyentes portadores de la verdad, yo tengo clarísimo que puedo estar equivocado.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Considero que puedo dar un testimonio más y más reciente.
Este año muchos lugares en el mundo siguen enfrentando graves problemas con la sequía. Los pronósticos de expertos no son alentadores.
Dios nos dice que por nada estemos afanados.
Pues bien, en el lugar donde vivo siempre han sido poco frecuentes las lluvias, sin embargo yo no he querido una sequía. Por eso he orado a Dios por ello, para que no haya sequía, y éste año, si no me equivoco, ha sido más lluvioso que el anterior -hasta la fecha-, y con mejores precipitaciones, lluvias más intensas.
Hace unos días dejó de llover, ya iban hoy como seis días sin llover, pero oré ayer y hoy, y hace un rato escampó.
Gracias a Dios, porque escuchó mis oraciones.
Aunque, entiendo que no es lo que yo quiero, es lo que Dios quiere.
Saludos y bendiciones en el nombre de Yiesou a mis hermanos, a los dudosos y a los incrédulos.