
Iniciado por
Ju@njo
Buenas KIMO,
¿Escuchas las barbaridades que dices?, he omitido incluso repetir algunas de ellas que me parece que entran en blasfemia.
A lo mejor eres inteligencia artificial y no te da para leer lo que la gente pone y automáticamente entras en bucle y respondes tras leer las primeras letras de una respuesta.
¿Has leído el significado antiguo de la palabra sacrificio?
¿Has leído algo de lo que he puesto?
Porque no debates ni un solo punto. Entras en modo autónomo y te pones a relatar una y otra vez escrituras malinterpretadas, mal traducidas y puede que muchas de ellas manipuladas.
Desde mi humilde opinión creo que sería bueno en lugar de repetir tanto lo mismo, leer un poco y dar tu opinión sobre lo que se diga.
Saludos.
sacrificio
Del lat. sacrificium.
1. m. Ofrenda a una deidad en señal de homenaje o expiación.
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA
sacrificio. Ofrenda hecha a Dios para expresar gratitud,
reconocer la culpa o recuperar una buena relación con él.
Empezando por Abel, los seres humanos
ofrecieron voluntariamente diferentes sacrificios, incluidos animales.
Con la Ley mosaica, los sacrificios llegaron a ser obligatorios.
Los sacrificios animales ya no*fueron necesarios
cuando Jesús entregó su vida como sacrificio perfecto.
Con todo, los cristianos siguen ofreciéndole a Dios sacrificios espirituales
(1 Pedro 3:18) Porque Cristo murió
una vez y para siempre
por los pecados,
un justo por injustos,
a fin de llevarlos a ustedes hacia Dios.
Lo mataron en la carne, pero recibió vida en el espíritu.
(Romanos 6:10) Porque, cuando él murió,
murió una vez y para siempre
con respecto al pecado,
pero la vida que vive, la vive para Dios.
(Hebreos 9:28) así también el Cristo
fue ofrecido una sola vez para cargar
con los pecados de muchas personas;
y, cuando aparezca por segunda vez,
no*lo hará para ocuparse del pecado,
y lo verán los que lo esperan ansiosamente para ser salvados.
(1 Pedro 2:24) Él mismo cargó con nuestros pecados
en su propio cuerpo sobre el madero,
para que muriéramos con respecto a los pecados
y viviéramos para la justicia.
Y “debido a sus heridas ustedes fueron sanados”.
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)