La normalización se concreta en una historia singular, concreta. El sueño truncado de una vida propia regresa a una "normalidad" la vida sigue. Los disparadores psicosociales están allí, presentes, abiertos y ocultos. Todo esto que relata, son sus palabras, sus propias ideas, la manera como lo dice. La realidad de lo acontecido se reconstruye en impresiones desde los individuos, en percepciones y modos de ver, en la jerarquización de esas impresiones y en la memoria.

I. De vuelta en la Ciudad de México

Llegando a casa bajé mis maletas, mi madre estaba en la entrada de la puerta de la casa le abracé y le dije mamá.

Entonces subí a la azotea de la casa de mi hermana Griselda (que hay una habitación de planchado), así que le dije a mi cuñado Gregorio que me tomará una fotografía en la habitación de planchado, y me la tomo yo sentada sobre un perro de peluche, se me puede notar mi short y blusa de mezclilla y se puede notar también que llevaba puesto en el cuello un rosario que es el rosario que me acompañaba durante toda mi estancia en Progreso). Acto seguido me fui a mi recamara y pude notar que mi librero lo habían sacado de la habitación y me lo habían cambiado por otro mueble con repisas, acto seguido comencé a escribir una carta a Felipe, diciéndole que me habían drogado y le hacía en esa carta la propuesta de ir a su casa para vivir).

Terminando la carta. Me dormí y ya amaneciendo al otro día me sentí rara desconocí mi recamara, pues yo ya no estaba en la recamara de playa. Pasadas aproximadamente 2 semanas, mi madre junto con Griselda, me llevaron con un médico internista del hospital psiquiátrico del IMSS y ese medico me pesaba, me media la cintura, me palpaba el vientre. Y cada vez que iba a su consulta le insista que quería ir de vuelta a Progreso, él me comenzó a recetar clonazepam en solución de 2.5 mg/mL, y comencé a subir un poco de peso (recuerdo que cada vez que el doctor me llevaba a la camilla para poder palparme el vientre yo le decía que me quería regresar a Progreso). Entonces como veía mi hermana Griselda que me la pasaba llorando durante la consulta entonces dejaron de llevarme ahí.


Trabajo en la Universidad ROBLE

No recuerdo bien hasta cuando deje de ir a consulta, lo que recuerdo es que conseguí trabajo y comencé a trabajar para la Universidad ROBLE, recuerdo que para llegar al trabajo yo en el transporte público me aguantaba el sueño. Era el año 2015 el año en que comencé a trabajar para esa Universidad. Me sentía útil de poder colaborar para esta Universidad en la que estuve trabajando desde el 8 de enero de 2015 al 7 de abril del 2017. Y después de trabajar para esa Universidad me comencé a sentir sola.