Lo que enseña Mateo 20:28 es que Jesús no vino a ser servido, sino a servir y a dar su vida en redención de muchos. Y con esta enseñanza, Jesús abrogó los mandatos del Antiguo Testamento que mantenían a muchos hombres en la esclavitud, pues Jesús mandó a sus discípulos hacer como Él hizo, que no vino a ser servido.
Y ésta era la redención (salvación) para muchos que vivían oprimidos y en la esclavitud, pues Jesús nos salvó de los mandatos del Antiguo Testamento que ordenaban a los hombres esclavitud, sacrificios, penas de muerte, guerras y masacres de pueblos enteros.