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Como demócrata, no participo en esta disputa en que gracias a Franco se alejó el peligro del sanguinario oso ruso, o que gracias a Fidel, el Tío Sam no pudo clavar sus garras imperialistas en Cuba.
Caer en la defensa de dictadores usando argumentos del menos malo, es una muestra inequívoca de que de demócratas, bien poco tienen las partes enfrentadas.
Dictadores son dictadores. Apoyados por ejércitos y constituciones creadas entre gallos y media noche, son una pústula que por suerte están siendo extirpadas.

Después de Camboya, España es el segundo país en el mundo con más personas desaparecidas. Un 10% de los cubanos huyeron a otros países, y sobre fusilados y desaparecidos, algún día sabremos los datos.

¿Cómo se pueden defender esas dictaduras?
¿Cómo se pueden defender los casi 40 años de Franco, y los 55 de Fidel?

El argumento de "si no fuera por...hoy estaríamos..." es de tan poco vuelo y tan poco peso, que ni en broma debería utilizarse. Es mucho mejor quitarse las caretas y decir: Estoy de acuerdo con esas dictaduras y hago votos para que continúen (o que vuelvan).

El decir si, pero no, lo que demuestra es que el pero no, es únicamente para no dejar de ser políticamente correcto. El tirar un tiro por el gobierno y otro por la revolución, es la cómoda posición del que no quiere jugársela, mostrando dónde está su trinchera.

O somos, o no somos.



PD: En el sur de mi país, tenemos un pájaro llamado Quero-quero. Cuando uno camina por el campo, de repente el Quero-quero te ataca. Y cómo! Picotones, chirridos, te golpean con las púas que tienen en las alas, en fin...jodidos pajaritos. Uno se imagina que están defendiendo su territorio, su nido, sus pichones. Les aseguro que por más que los busquen no los encuentran, ya que no están ahí. El hace eso, para que todos imaginen que si, pero están bien lejos.

Muchos que gritan aquí, sus nidos están a miles de kilómetros. Al Norte o al Este.

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