Página 332 de 535 PrimeroPrimero ... 232282322330331332333334342382432 ... ÚltimoÚltimo
Mostrando resultados del 3.311 al 3.320 de 5344

Tema: Lo que los ateos esconden

  1. #3311
    Fecha de Ingreso
    18-mayo-2011
    Mensajes
    22.829

    Predeterminado

    Cita Iniciado por CIKITRAKE Ver Mensaje
    Hola Zampabol. Mira qué extraño, ¿No notas diferencia de la fotografía de los ateos con la original? Parece que le falta algo. Saludos.


    ¿Estás sugiriendo que eso es un montaje? ¿No estarás insinuando que los ateos militantes mienten, verdad?
    Jamás, ¡Mira bien lo que te digo Ciki! Jamás he visto yo en este foro a un ateo militante mintiendo o tratando de colarnos un montaje. Esas insinuaciones que haces no son propias de ti.

    El ateo militante es honrado, sincero, honesto, pacífico y sobre todo tolerante con las creencias de los demás

  2. #3312
    Fecha de Ingreso
    06-febrero-2013
    Ubicación
    MADRID
    Mensajes
    4.455

    Predeterminado

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    ¿Estás sugiriendo que eso es un montaje? ¿No estarás insinuando que los ateos militantes mienten, verdad?
    Jamás, ¡Mira bien lo que te digo Ciki! Jamás he visto yo en este foro a un ateo militante mintiendo o tratando de colarnos un montaje. Esas insinuaciones que haces no son propias de ti.

    El ateo militante es honrado, sincero, honesto, pacífico y sobre todo tolerante con las creencias de los demás
    Pero que pildoras tan amargas teneis que tragaros por culpa de la fotografia!
    Deberiais rezar para que, mediante uno de esos abundantisimos milagros, desaparecieran las fotografias, porque defender la falsedad de un texto, es facil si se insiste lo suficiente, pero eso de las fotografias.....
    Rezad, amadisimos hermanos, rezad!
    Deberias plantearte ponerte zilicios, que eso le gusta a dios un monton, y asi le predispones a ese tan necesario milagro.
    O flagelarte.
    O crucificarte.
    Tienes muchas opciones.

  3. #3313
    Fecha de Ingreso
    18-mayo-2011
    Mensajes
    22.829

    Predeterminado

    Cita Iniciado por etanol Ver Mensaje
    Pero que pildoras tan amargas teneis que tragaros por culpa de la fotografia!
    Deberiais rezar para que, mediante uno de esos abundantisimos milagros, desaparecieran las fotografias, porque defender la falsedad de un texto, es facil si se insiste lo suficiente, pero eso de las fotografias.....
    Rezad, amadisimos hermanos, rezad!
    Deberias plantearte ponerte zilicios, que eso le gusta a dios un monton, y asi le predispones a ese tan necesario milagro.
    O flagelarte.
    O crucificarte.
    Tienes muchas opciones.
    Pero, mi querido ateo militante: ¿No habíamos quedado ya en que los curas eran regordetes, vejestorios y pedófilos?
    Ahora resulta que se juntaron todos de la misma "quinta" y ni uno regordete...¡¡Qué cosas eti!! Eres un libro abierto de esos que dice Lomita que te has empapado.

    ¿El de la chistera es el obispo?

  4. #3314
    Fecha de Ingreso
    06-febrero-2013
    Ubicación
    MADRID
    Mensajes
    4.455

    Predeterminado

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    Pero, mi querido ateo militante: ¿No habíamos quedado ya en que los curas eran regordetes, vejestorios y pedófilos?
    Ahora resulta que se juntaron todos de la misma "quinta" y ni uno regordete...¡¡Qué cosas eti!! Eres un libro abierto de esos que dice Lomita que te has empapado.

    ¿El de la chistera es el obispo?
    Eso es ahora, que la falta de vocaciones "esta poniendo en peligro la viña del señor", en los años del hambre, habia palos por meterse a cura ....... y hasta monja lega, o sea, fregona sin sueldo.
    Eso de poder llenar la barriga acerca mucho a dios.

  5. #3315
    Fecha de Ingreso
    06-febrero-2013
    Ubicación
    MADRID
    Mensajes
    4.455

    Predeterminado

    El 'cura verdugo' del penal de Ocaña
    http://www.publico.es/452554/el-cura...ocana?src=lmvn

    Entre 1939 y 1959, 1.300 presos políticos fueron asesinados en Ocaña. El capellán de la prisión era el encargado de dar el tiro de gracia.

    ALEJANDRO TORRÚS Madrid 24/03/2013 09:09 Actualizado: 26/03/2013 10:42

    Estos versos anónimo escritos por presos republicanos de la cárcel de Ocaña en 1941 bajo la supervisión de Miguel Hernández, según relató el militante comunista Miguel Nuñez en sus memorias, es el único documento escrito que da fe de los crímenes cometidos por “el cura verdugo de Ocaña”, tal y como los reos le bautizaron. Se trataba del capellán del penal de esta localidad toledana, también conocido entre los familiares de los reclusos como el “cura asesino”. Un religioso entre cuyas funciones se encontraba dar el tiro de gracia a los republicanos condenados a muerte.

    “Todos sabíamos que era el cura. Participaba en las palizas y después gustaba de coger su pistola y dar el último disparo. Pero poco sabíamos de él. No se dejaba ver por el pueblo y un buen día desapareció de la prisión. Ni siquiera recuerdo su nombre”, cuenta a Público Celedonio Vizcaíno, de 75 años. Su abuelo, de quien heredó el nombre, fue fusilado el 8 de julio de 1939 por “el gran delito de pertenecer a Juventudes Comunistas”.

    En la memoria de este hombre, sin embargo, sí ha quedado marcada una imagen: la de decenas de presos caminando desde el penal hasta el cementerio en mitad de la noche. En una larga y profusa fila. Presos cabizbajos seguidos de una camioneta militar. Los registros dan fe de que una noche llegaron a ser 57 los fusilados. “A veces, cuando eran pocos, iban todos en la camioneta”, recuerda. Después llegaba el silencio más absoluto y, por último, el ruido de una ametralladora que los verdugos apoyaban sobre un montón de piedras.

    Los registros recogen hasta 57 fusilamientos en una noche También recuerda Celedonio las mañanas en las que acompañaba a su madre al cementerio para poner flores a la fosa común donde descansan los restos de su padre. Las tres fosas del pequeño cementerio permanecieron abiertas hasta 1945 y él, siendo un niño de 5 años, podía ver los cuerpos de los fusilados comidos por la cal. Entre ellos, el de su progenitor

    Otros días, llegar hasta la fosa se hacía imposible. “Muchas veces tuvimos que salir corriendo y escondernos en cualquier lugar cuando íbamos al cementerio. Las familias de derechas nos señalaban, nos insultaban y temíamos que nos mataran”, señala este hombre. El miedo no es de extrañar. Además de su abuelo, murieron otros tres familiares fusilados en el penal.
    1.300 fusilados

    Sólo en Ocaña, un pueblo de apenas 11.000 habitantes de la provincia de Toledo, se registraron entre 1939 y 1959, fecha del último fusilamiento, 1.300 víctimas de la represión franquista. En su pequeño cementerio se concentran tres fosas comunes. La mayoría murieron fusilados, pero un gran número de ellos lo hicieron enfermos dentro de la prisión. La Asociación de Familiares de Ejecutados en la Cárcel de Ocaña, tras examinar los registros del penal, señala que en invierno la lista de fallecidos aumentaba considerablemente debido a las penosas condiciones de vida a las que estaban sometidos los presos. En muchos casos los verdugos ni siquiera necesitaban balas para cometer sus crímenes.

    “Hemos encontrado varias partidas de defunción de bebés, que morían en la cárcel. Era habitual que las presas tuvieran allí a sus hijos. De hecho, conozco un caso escalofriante”, narra Carmen Díaz, vicepresidenta de la asociación. “Una presa fue condenada a muerte pero tenía un bebé en edad de lactancia. Las monjas permitieron que la presa continuara con vida hasta que el bebé cumplió dos años. Entonces, se lo quitaron de los brazos y la fusilaron. El bebe fue abandonado entre los matojos, aunque me consta que logró sobrevivir”, cuenta esta mujer, cuya historia familiar no es menos trágica.

    Su abuelo murió en la prisión tras ser juzgado tres veces: una para condenarle a muerte, otra para conmutarle la pena por 30 años de prisión y, finalmente, una última ocasión, en la propia cárcel, para condenarlo de nuevo a muerte. La sentencia fue ejecutada inmediatamente sin avisar a los familiares. “Sospechamos que el último juicio fue un fraude ya que no aparece en ningún registro. Simplemente, querían verlo muerto”, cuenta a Público Carmen.
    Marcos Ana y Hernández

    La cárcel de Ocaña ha pasado a la historia como uno de los símbolos de la represión franquista. Tanto por el alto número de fusilados como por el nombre de los presos que albergó. Entre sus barrotes estuvieron Miguel Hernández y el poeta Marcos Ana en el año 1940-41, el primero, y a partir de 1944, el segundo. A pesar de la breve estancia de Hernández en la prisión, su figura se ha transmitido en la historia oral de los familiares de las víctimas.

    “Siempre se ha contado que Miguel Hernández enseñaba a leer y a escribir a los presos republicanos y que, a escondidas de los guardias, organizaba clases de poesía. El poema de El cura verdugo surgió de esas clases”, asegura Julián Ramos, cuyo abuelo fue fusilado en el cementerio de Ocaña por ser el alcalde socialista de San Bartolomé de las Abiertas (Toledo).

    La versión de Julián del poema fue corroborada por el militante comunista Miguel Nuñez, fallecido en 2008, quien estuvo preso en el mismo municipio en aquellos años y relató este episodio en sus memorias. No obstante, este diario no ha podido corroborar la autoría del poema tras consultar biógrafos y expertos de la vida y obra de Hernández.

    Marcos Ana, el reo político que pasó más tiempo en las cárceles franquistas (23 años), describió para el documental ‘Memoria Viva’ las condiciones de vida del penal de Ocaña, donde estuvo preso hasta 1946.

    “En el penal de Ocaña conocí lo más duro para un condenado a muerte: la soledad. Me llevaron a una pequeña celda, de unos dos metros de largo y tan estrecha que con los brazos en cruz tocaba las paredes. Una puerta de hierro, un retrete en un rincón, un colchón de esparto y un pequeño y alto tragaluz enrejado iban a formar mi nuevo universo. Nos dejaban salir al patio dos veces al día, una hora por la mañana y otra por la tarde”, detalla el poeta, que añade que el momento más triste del día era el atardecer, cuando se despedían unos de otros “sin saber si aquél sería el último abrazo”.


    Poema íntegro

    Muy de mañana, aún de noche,
    Antes de tocar diana,
    Como presagio funesto
    Cruzó el patio la sotana.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Llegó al pabellón de celdas,Allí oímos sus pisadas
    Y los cerrojos lanzaron
    Agudos gritos de alarma.
    “¡Valor, hijos míos,
    que así Dios lo manda!”
    Cobarde y cínico al tiempo
    Tras los civiles se guarda,
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Los civiles temblorososLes ataron por la espalda
    Para no ver aquellos ojos
    Que mordían, que abrasaban.
    Camino de Yepes van,
    Gigantes de un pueblo heroico,
    Camino de Yepes van.
    Su vida ofrendan a España,
    Una canción en los labios
    Con la que besan la Patria.
    El cura marcha detrás,
    Ensuciando la mañana.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Diecisiete disparosTaladraron la mañana
    Y fueron en nuestros pechos
    Otras tantas puñaladas.
    Los pájaros lugareños
    Que sus plumas alisaban,
    Se escondieron en los nidos
    Suspendiendo su alborada.
    La Luna lo veía y se tapaba
    Por no fijar su mirada
    En el libro, en la cruz
    Y en la “star” ya descargada.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

  6. #3316
    Fecha de Ingreso
    18-mayo-2011
    Mensajes
    22.829

    Predeterminado

    Cita Iniciado por etanol Ver Mensaje
    El 'cura verdugo' del penal de Ocaña
    http://www.publico.es/452554/el-cura...ocana?src=lmvn

    Entre 1939 y 1959, 1.300 presos políticos fueron asesinados en Ocaña. El capellán de la prisión era el encargado de dar el tiro de gracia.

    ALEJANDRO TORRÚS Madrid 24/03/2013 09:09 Actualizado: 26/03/2013 10:42

    Estos versos anónimo escritos por presos republicanos de la cárcel de Ocaña en 1941 bajo la supervisión de Miguel Hernández, según relató el militante comunista Miguel Nuñez en sus memorias, es el único documento escrito que da fe de los crímenes cometidos por “el cura verdugo de Ocaña”, tal y como los reos le bautizaron. Se trataba del capellán del penal de esta localidad toledana, también conocido entre los familiares de los reclusos como el “cura asesino”. Un religioso entre cuyas funciones se encontraba dar el tiro de gracia a los republicanos condenados a muerte.

    “Todos sabíamos que era el cura. Participaba en las palizas y después gustaba de coger su pistola y dar el último disparo. Pero poco sabíamos de él. No se dejaba ver por el pueblo y un buen día desapareció de la prisión. Ni siquiera recuerdo su nombre”, cuenta a Público Celedonio Vizcaíno, de 75 años. Su abuelo, de quien heredó el nombre, fue fusilado el 8 de julio de 1939 por “el gran delito de pertenecer a Juventudes Comunistas”.

    En la memoria de este hombre, sin embargo, sí ha quedado marcada una imagen: la de decenas de presos caminando desde el penal hasta el cementerio en mitad de la noche. En una larga y profusa fila. Presos cabizbajos seguidos de una camioneta militar. Los registros dan fe de que una noche llegaron a ser 57 los fusilados. “A veces, cuando eran pocos, iban todos en la camioneta”, recuerda. Después llegaba el silencio más absoluto y, por último, el ruido de una ametralladora que los verdugos apoyaban sobre un montón de piedras.

    Los registros recogen hasta 57 fusilamientos en una noche También recuerda Celedonio las mañanas en las que acompañaba a su madre al cementerio para poner flores a la fosa común donde descansan los restos de su padre. Las tres fosas del pequeño cementerio permanecieron abiertas hasta 1945 y él, siendo un niño de 5 años, podía ver los cuerpos de los fusilados comidos por la cal. Entre ellos, el de su progenitor

    Otros días, llegar hasta la fosa se hacía imposible. “Muchas veces tuvimos que salir corriendo y escondernos en cualquier lugar cuando íbamos al cementerio. Las familias de derechas nos señalaban, nos insultaban y temíamos que nos mataran”, señala este hombre. El miedo no es de extrañar. Además de su abuelo, murieron otros tres familiares fusilados en el penal.
    1.300 fusilados

    Sólo en Ocaña, un pueblo de apenas 11.000 habitantes de la provincia de Toledo, se registraron entre 1939 y 1959, fecha del último fusilamiento, 1.300 víctimas de la represión franquista. En su pequeño cementerio se concentran tres fosas comunes. La mayoría murieron fusilados, pero un gran número de ellos lo hicieron enfermos dentro de la prisión. La Asociación de Familiares de Ejecutados en la Cárcel de Ocaña, tras examinar los registros del penal, señala que en invierno la lista de fallecidos aumentaba considerablemente debido a las penosas condiciones de vida a las que estaban sometidos los presos. En muchos casos los verdugos ni siquiera necesitaban balas para cometer sus crímenes.

    “Hemos encontrado varias partidas de defunción de bebés, que morían en la cárcel. Era habitual que las presas tuvieran allí a sus hijos. De hecho, conozco un caso escalofriante”, narra Carmen Díaz, vicepresidenta de la asociación. “Una presa fue condenada a muerte pero tenía un bebé en edad de lactancia. Las monjas permitieron que la presa continuara con vida hasta que el bebé cumplió dos años. Entonces, se lo quitaron de los brazos y la fusilaron. El bebe fue abandonado entre los matojos, aunque me consta que logró sobrevivir”, cuenta esta mujer, cuya historia familiar no es menos trágica.

    Su abuelo murió en la prisión tras ser juzgado tres veces: una para condenarle a muerte, otra para conmutarle la pena por 30 años de prisión y, finalmente, una última ocasión, en la propia cárcel, para condenarlo de nuevo a muerte. La sentencia fue ejecutada inmediatamente sin avisar a los familiares. “Sospechamos que el último juicio fue un fraude ya que no aparece en ningún registro. Simplemente, querían verlo muerto”, cuenta a Público Carmen.
    Marcos Ana y Hernández

    La cárcel de Ocaña ha pasado a la historia como uno de los símbolos de la represión franquista. Tanto por el alto número de fusilados como por el nombre de los presos que albergó. Entre sus barrotes estuvieron Miguel Hernández y el poeta Marcos Ana en el año 1940-41, el primero, y a partir de 1944, el segundo. A pesar de la breve estancia de Hernández en la prisión, su figura se ha transmitido en la historia oral de los familiares de las víctimas.

    “Siempre se ha contado que Miguel Hernández enseñaba a leer y a escribir a los presos republicanos y que, a escondidas de los guardias, organizaba clases de poesía. El poema de El cura verdugo surgió de esas clases”, asegura Julián Ramos, cuyo abuelo fue fusilado en el cementerio de Ocaña por ser el alcalde socialista de San Bartolomé de las Abiertas (Toledo).

    La versión de Julián del poema fue corroborada por el militante comunista Miguel Nuñez, fallecido en 2008, quien estuvo preso en el mismo municipio en aquellos años y relató este episodio en sus memorias. No obstante, este diario no ha podido corroborar la autoría del poema tras consultar biógrafos y expertos de la vida y obra de Hernández.

    Marcos Ana, el reo político que pasó más tiempo en las cárceles franquistas (23 años), describió para el documental ‘Memoria Viva’ las condiciones de vida del penal de Ocaña, donde estuvo preso hasta 1946.

    “En el penal de Ocaña conocí lo más duro para un condenado a muerte: la soledad. Me llevaron a una pequeña celda, de unos dos metros de largo y tan estrecha que con los brazos en cruz tocaba las paredes. Una puerta de hierro, un retrete en un rincón, un colchón de esparto y un pequeño y alto tragaluz enrejado iban a formar mi nuevo universo. Nos dejaban salir al patio dos veces al día, una hora por la mañana y otra por la tarde”, detalla el poeta, que añade que el momento más triste del día era el atardecer, cuando se despedían unos de otros “sin saber si aquél sería el último abrazo”.


    Poema íntegro

    Muy de mañana, aún de noche,
    Antes de tocar diana,
    Como presagio funesto
    Cruzó el patio la sotana.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Llegó al pabellón de celdas,Allí oímos sus pisadas
    Y los cerrojos lanzaron
    Agudos gritos de alarma.
    “¡Valor, hijos míos,
    que así Dios lo manda!”
    Cobarde y cínico al tiempo
    Tras los civiles se guarda,
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Los civiles temblorososLes ataron por la espalda
    Para no ver aquellos ojos
    Que mordían, que abrasaban.
    Camino de Yepes van,
    Gigantes de un pueblo heroico,
    Camino de Yepes van.
    Su vida ofrendan a España,
    Una canción en los labios
    Con la que besan la Patria.
    El cura marcha detrás,
    Ensuciando la mañana.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!

    Diecisiete disparosTaladraron la mañana
    Y fueron en nuestros pechos
    Otras tantas puñaladas.
    Los pájaros lugareños
    Que sus plumas alisaban,
    Se escondieron en los nidos
    Suspendiendo su alborada.
    La Luna lo veía y se tapaba
    Por no fijar su mirada
    En el libro, en la cruz
    Y en la “star” ya descargada.
    ¡Más negro, más, que la noche
    Menos negro que su alma
    El cura verdugo de Ocaña!
    Verás tú etanol. A mí el País y Público me gustan mucho, pero.....¡¡¡¡Joder, lee otra cosas que se te van a derretir los sesos con tanto furor marxista!!!

    Tú me perdonarás, pero otro tocho panfletario de Público no me leo, estoy convencido de que te da la razòn. (Y sin mirar, fíjate)

  7. #3317
    Fecha de Ingreso
    18-mayo-2011
    Mensajes
    22.829

    Predeterminado

    Cita Iniciado por etanol Ver Mensaje
    Eso es ahora, que la falta de vocaciones "esta poniendo en peligro la viña del señor", en los años del hambre, habia palos por meterse a cura ....... y hasta monja lega, o sea, fregona sin sueldo.
    Eso de poder llenar la barriga acerca mucho a dios.
    ¿Entonces estamos de acuerdo que esos escuchimiciados milicianos no son curas de verdad?:sleep:


    ¡¡Me meo toa contigo....!!

  8. #3318
    Fecha de Ingreso
    06-febrero-2013
    Ubicación
    MADRID
    Mensajes
    4.455

    Predeterminado

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    ¿Entonces estamos de acuerdo que esos escuchimiciados milicianos no son curas de verdad?:sleep:


    ¡¡Me meo toa contigo....!!
    Que te hace creer tal cosa de mi post?
    Ya estas otra vez esnifando incienso?
    Entre la operacion de implante del catecismo en tu cerebro y los chutes de incienso que te pegas, tienes que tener el cerebro como el de las vacas locas.

  9. #3319
    Fecha de Ingreso
    06-febrero-2013
    Ubicación
    MADRID
    Mensajes
    4.455

    Predeterminado

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    Verás tú etanol. A mí el País y Público me gustan mucho, pero.....¡¡¡¡Joder, lee otra cosas que se te van a derretir los sesos con tanto furor marxista!!!

    Tú me perdonarás, pero otro tocho panfletario de Público no me leo, estoy convencido de que te da la razòn. (Y sin mirar, fíjate)
    Lo se, tu no lees nada que ponga en peligro tu alma inmortal!
    A ti te gustaria utilizar el culo del papa como periscopio para no ver nada mas que lo que el viera.

  10. #3320
    Fecha de Ingreso
    01-marzo-2013
    Mensajes
    15.791

    Predeterminado

    Cita Iniciado por CIKITRAKE Ver Mensaje
    Hola Zampabol. Mira qué extraño, ¿No notas diferencia de la fotografía de los ateos con la original? Parece que le falta algo. Saludos.


    Pues es exactamente la misma que la que acompaña la Carta de los Obispos tribulados envío el enlace y lo compruebas, y si eso me dices cual es la diferencia o que le falta ... no vayas ha hacer como siempre decir decir y luego desaparecer unos días para no contestar, o sea encizañar solamente...

    http://imagenes.publico.es/resources...uerracivil.pdf

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    ¿Estás sugiriendo que eso es un montaje? ¿No estarás insinuando que los ateos militantes mienten, verdad?
    Jamás, ¡Mira bien lo que te digo Ciki! Jamás he visto yo en este foro a un ateo militante mintiendo o tratando de colarnos un montaje. Esas insinuaciones que haces no son propias de ti.

    El ateo militante es honrado, sincero, honesto, pacífico y sobre todo tolerante con las creencias de los demás
    ¿Qué pasa que ahora los creyentes militantes se han hecho ateos militantes?, eso siempre lo dije yo, que no había mejores enemigos de sus morales que ellos mismos je je..

    Cita Iniciado por Zampabol Ver Mensaje
    Pero, mi querido ateo militante: ¿No habíamos quedado ya en que los curas eran regordetes, vejestorios y pedófilos?
    Ahora resulta que se juntaron todos de la misma "quinta" y ni uno regordete...¡¡Qué cosas eti!! Eres un libro abierto de esos que dice Lomita que te has empapado.

    ¿El de la chistera es el obispo?
    Mi querido creyente ateo, en la guerra eran todos flaquitos flaquitos menos paquito, en la posguerra como paquito quisieron estar los curitas ... y lo consiguieron ...

    El de la chistera no es el obispo, es el enterrador .... ¡¡Como les gusta la sangre a estos pro vida!!

Normas de Publicación

  • No puedes crear nuevos temas
  • No puedes responder mensajes
  • No puedes subir archivos adjuntos
  • No puedes editar tus mensajes
  •