Italia, como España, Grecia y Portugal, recibiò la receta adelgasante y de austeridad de la Europa.
Como el hecho de tomar decisiones antipopulares es un suicidio polìtico para el gobierno de turno y, ademàs, fuente de desòrdenes populares de la oposiciòn, se decidiò que era mejor que Berlusconi se alejara y dejara a un gobierno técnico que hiciera todas las porquerìas. Luego, terminadas estas, Berlusconi podìa volver pero con la imagen de que él no fue quien tomò esas medidas antipopulares.
En realidad, de "golpe" nada. Fue una medida polìtica para salvar la cara y poder seguir con sus correrìa el año que viene.
Rajoy, en vez, serà un cadàver polìtico por lo que està haciendo y serà el chivo expiatorio.