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Estrella_fugaz
Es una noticia inmejorable.
Aunque, no sé si Peña tenga dignidad, visto lo visto a lo largo de su sexenio.
Pero lo de la marrana es lo mejor de la nota, jajajaaaa me parte de la risa.
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Estrellita, por la tarde te dije que...
Iniciado por
Aquiles_Brinco
La balanza comercial nos favorece. Yo espero que Donald Trump pronto se las ingenie para producir los más de 200 mil millones de bienes que cada año les vendemos.
[...]
Con ese cuento de gravar las remesas logró engañar a sus electores. Y para muestra: Criptón36. Se les olvida, Estrellita, la balanza comercial. Se acaba el tratado, y empiezan los aranceles de ambas partes. Vendieron muy bien ese cuento de que sólo ellos pueden tasar las importaciones, y aquéllos se lo comieron sin masticarlo.
Aquí en México, Estrellita, tenemos la mala costumbre de cargar al precio de venta la volatilidad, los impuestos, lo fortuito y cualquier otro elemento del cual no tengamos suficiente proyección. ¡Que del índice de rentabilidad no cedemos ni un punto! Lo ideal, en todo caso, sería reajustar los costos de producción.
Si Estados Unidos nos cobra arancel, la medida comodona que tomarían nuestros productores sería, en general, incrementar los precios, pues nuestra economía, dados los procesos inflacionarios [además], no tolera ajustes en producción. El Estado mexicano, por su parte, reviraría gravando las importaciones americanas. ¡Son ellos, los Estados Unidos, los que tienen un déficit, no sólo con México, sino con otra veintena de países! ¡Nos compran más de lo que les vendemos, y nosotros no vamos a ajustar nuestros costos, no, les vamos a vender más caro para compensar la carga impositiva, y serán los consumidores americanos los que sufran las consecuencias!
No sé qué tenga Trump en mente. Tiene la idea de que, de la noche a la mañana, la industria doméstica va a poder satisfacer el consumo equivalente a esos más de 200 mil millones. ¡Imposible!
El escenario nos favorece, en todo sentido. Trump ENGAÑÓ a sus electores, vendiéndoles el cuento de que, a través de aranceles y demás 'apremios', iba a costear el muro y, de paso, limitar, por coacción comercial, la competitividad mexicana respecto de la inversión extranjera directa.
Lo comenté una y otra vez.
¿Y sabes qué? Tu secretario de relaciones exteriores [el tuyo, mío no es] lo sabe, y lo entiende muy bien:
Besines.