Una chuleta es una costilla amputada, que es lo que hizo Jehová. Lo llevó al hospital, el cirujano le amputó una "costilla", la que pasó a ser "chuleta" en ese momento.
Y quién habló fue la culebra, esa de piel escamosa y lubricada.
Porque si no hubiese sido la culebra, entonces ¿porqué Jehová la condenó a arrastrarse por la tierra?