EL SACRIFICIO MAYOR
ES EL QUE HIZO JESUS
DANDO SU SANGRE PARA SALVARNOS

PORQUE A SU PADRE
NO LE AGRADABAN AQUELLOS SACRIFICIOS
LE PREPARO UN CUERPO
Y POR EMEDIO DE ESE SACRIFICIO
SOMOS SANTIFICADOS ANTE DIOS

LA PASCUA
fue ley de Jehova
recordando cuando Jehova saco a los Judíos del cautiverio

Jesús sacrifico un cordero
que lo representaba a el
el cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

Todos esos años desde que salieron de esclavitud
celebraron la pascua como mandaba la ley de Dios.

No hay por que pensar que esta ley no fue dada por Jehova
ninguna razón hay.

ADEMAS, JESÚS NO OBEDECERÍA MANDATOS DE HOMBRE
Y JESÚS OBEDECIÓ LA LEY DE LA PASCUA EN LA CUAL SE HACIA UN SACRIFICIO A JEHOVA DIOS.

Los cristianos verdaderos ofrecen sacrificios de labios
nos sacrificamos cuando vamos a la cárcel por obedecer a Jesus y no matar

Nos sacrificamos cuando estamos cansados de trabajar
pero salimos a predicar de casa en casa
es un sacrificio a Dios.



Hebreos 10:8-10
Palabra de Dios para Todos (PDT)


8 Cristo comienza diciendo: «No te agradan los sacrificios ni las ofrendas.
Tampoco te gustan los sacrificios de animales muertos y quemados,
ni los sacrificios que se ofrecen por los pecados», aunque todos estos sacrificios los ordena la ley.

9 Luego añade: «Aquí estoy, Dios. En el libro de la ley está escrito acerca de mí:
Vine a hacer lo que tú quieres que haga». Dios reemplaza el primer sistema de sacrificios por el sacrificio de Cristo.
10 Por eso el sacrificio del cuerpo de Cristo nos hace santos.
Él cumplió con lo que quería Dios cuando se entregó por nosotros una sola vez y para siempre.



ROBERTO NOS EXPLICO ESTE TEXTO
Roberto0;1695236114 escribió:
Por que Dios no queria esos sacrificios que mandaba la ley

por eso le preparo un cuerpo y quito lo primero'y establecio lo segundo

estudis
y ora por entendimiento

Eso es correcto Roberto
muy bien explicado

Y para añadir a los que nos dice Robert
En primer lugar, dice que Dios no quiere ni le agradan sacrificios ni ofrendas de animales,
ni holocaustos para quitar el pecado, a pesar de que son cosas que la ley manda ofrecer.
Y después añade:«Aquí vengo para hacer tu voluntad.
Es decir, que quita aquellos sacrificios antiguos y pone en su lugar uno nuevo.
Dios nos ha consagrado porque Jesucristo hizo la voluntad de Dios
al ofrecer su propio cuerpo en sacrificio una sola vez y para siempre.