Cita Iniciado por Socorp Ver Mensaje
Hola,
que Malvado y Charpe no entiendan o, mejor dicho, no lean lo que escribo es algo a lo que estoy acostumbrado y no pretenderé que empiecen ahora.

La libertad de expresión no cambia por criticar pero si por ataques ofensivos. Decir, como hace Charpe, que "son mentirosos o delirantes" no es elegante en un debate. Serìa como decir que, por no lograr ver un ser ideal, los ateos son esquizofrénicos y no es asì…. no? Si lees mis post veràs que critico la religión pero sin insultar.

Usando “mi” libertad de expresiòn critico los ateos y su modo de debatir; su arrogancia y su falta de inquietud para recibir conocimientos. Jamàs presentan evidencias ni anàlisis de lo que dicen: solo agresiones. Son tan escasos de entendimiento libre que creen que quien los critica debe ser por fuerza un creyente y, como sabemos, el único “no creyente” acà soy yo.

El hecho no es “no criticar” y dejar todo en un status quo, sino hacerlo a través de aquello que los ateos se atribuyen gratuitamente a sì mismos: el raciocinio. Repito que criticar y combatir al poder jeràrquico de la Iglesia es correcto porque es política, pero decirle delirante a alguien que siente algo que yo no siento es, a decir poco, ofensivo y chabacano.

El debate debería ser sobre las contradicciones de la Biblia de lo cual no he escrito nada porque, repito, no me interesa; aunque Malvado no logre ver esto. No es una discusión vàlida la de las contradicciones porque sabemos quién y cuàndo ha sido escrita, porqué y cuando fue modificada y actualizada. La discusión debería concentrarse en porqué se utiliza la Biblia y cuàles son los efectos sobre la sociedad; si el dragòn era rosa o celeste es una discusión de bajo perfil.

Una discusión sobre fùtbol o política acepta crìticas que hasta pueden ser vulgares, pero una de religión debe ser realizada en otro nivel porque se discuten sentimientos muy profundos del ser humano. Por eso mi intervención, para hacerles notar a los ateos que se puede “no creer”, presentando análisis concretos y siendo correcto en la discusión; sin improperios.

Todo ahì. Por lo demás, combatimos para el mismo ejercito.
Saludos.

El asunto no es que crean o no, sino que quieren que otros creamos y por lo menos en México la iglesia católica tiene un poder aún muy grande, capaz de encubrir crímenes. Yo no combato la creencia, combato la intervnción de los comerciantes de la fe en los ámbitos donde no tienen que actuar.

Desde la crítica y la burla no hay agresión, pero en la biblia se insulta a cualquier cantidad de minorías.

Ya la discusión antropológica, sociologica o histórica es otra cosa, y muy placentera, pero la realidad es que los creyentes no discuten en ese nivel pues, para hacer objeto de estudio al ser divino tendrían que despojarlo de sus atributos, y ellos mismos hacer a un lado sus opiniones subjtivas.