...iba una mujer joven adelante de mi, bonitas caderas. Pero lo que me llamo la atencion es que llevaba a su pequeño hijo de la mano, tres años cuando mucho, y caminaba con paso mas veloz de las posibilidades del bebe. Le decia que se apresurara, obviamente sin considerar que las pequeñas piernas hacian lo que podian. El bebe no parecia sufrir, es como si ya estuviera acostumbrado, como si fuera algo normal. He visto a niños llorar y llorar y aun asi ser llevados casi arrastrados por sus mamas. Estoy casi seguro que tienen una razon valida o algo urgente que les hace dejar de lado lo importante, sin embargo no es nada amable ni agradable.