
Iniciado por
Truhan
Yo opino que los T.de J. constituyen un grupo humano, que dejando de lado sus peculiaridades derivadas de su interpretación de las escrituras, llama la atención por su esfuerzo sincero y constante por intentar ser buenas personas.
Son honrados.
Son muy dignos.
Son confiables.
Son compasivos.
Son respetuosos
Creo que han dejado de ser una secta y son una religión.
A mi casa vienen seguido a tocar la puerta siempre me dicen, "señor solamente venimos a compartir la buenas nuevas del reino, le interesaría escucharlas...?", mi respuesta es siempre: "no, pero gracias por ofrecérmelo", y ese es mi real sentimiento, agradezco la actitud de gente que cree tener algo hermoso y está dispuesto a compartirlo con los demás; es demasiado cínico creer que salen de puerta en puerta para "convencer a la gente."
Recuerdo haber leido que en los campos de concentración nazis, los jerarcas del campo, solamente aceptaban ser afeitados por T.de J., no confiaban en nadie más.
Y vuelvo a preguntarles: Qué diferencia hay entre la actitud de esta gente y la que adoptaban los cristianos del primer siglo...?
Cómo sabemos donde está la linea divisoria entre un fanático y una persona de principios...?
Contéstenme.
Slds.