
Iniciado por
misericordia
Lo que dicen las cartas atribuidas a Pablo tú lo interpretas como a ti te gusta, sin importarte la Verdad de lo que te enseña el Evangelio.
JESÚS comisionó a Pablo para que fuera apóstol a las naciones,
una comisión que llevó a cabo con celo. (Ro 11:13.)
En su primer viaje misional se detuvo en Chipre
y llegó hasta Asia Menor.
Chusmas violentas lo echaron de sus ciudades
e incluso lo apedrearon hasta darlo por muerto; sin embargo,
continuó fortaleciendo a los que habían llegado a ser discípulos.
En su segundo viaje llegó hasta Macedonia y Grecia,
donde pudo dar testimonio en el Areópago de Atenas.
Durante su tercer viaje, predicó por tres años en Éfeso, encrucijada del mundo romano.
Luego marchó hacia Macedonia y Grecia a fin de edificar a las congregaciones que había allí.
Cuando el gobierno romano lo mantuvo preso,
usó bien su tiempo en escribir las cartas inspiradas que hoy forman parte del canon
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)