Cita Iniciado por Jandulilay Ver Mensaje
Yo con ustedes no tengo falta de andar con rodeos,tengo que argumentar que estáis muy lejos del cristianismo verdadero.
1º) No dais a conocer el nombre de Dios.
2º) Negáis el rescate.
3º) No predicáis el Reino de los cielos.
4º) Celebráis costumbres populares que no agradan al Dios bíblico.
Buenas Jandulilay,

Has mentido en el 100% de las cosas que has dicho.

1º) Primera Mentira. Si damos a conocer el nombre de Dios y además a diferencia de vosotros hacemos lo que Dios manda que es predicar el Evangelio.


"Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura." Marcos 16, 15

2º) Segunda Mentira. Dime una sola vez donde yo haya negado el rescate. Precisamente no paro de predicar que Jesucristo vino a librarnos del pecado y de las leyes injustas que NUNCA fueron de Dios del viejo testamento defectuoso y bajo las cuales mataron a Jesús dando con ello el mayor ejemplo de que dichas leyes no eran de Dios, ya que bajo esas mismas leyes mataron a Jesús.

"Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas.
Porque si aquel primero hubiera sido sin defecto, ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo." Marcos 8, 6-7

3º) Tercera Mentira. Todo el día estamos predicando el Evangelio que si lo practicas y lo predicas te da la salvación para alcanzar el reino de los cielos.

"Pero él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado." Lucas 4, 43
"Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios,
diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio." Marcos 1, 14-15

4º) Cuarta Mentira. En mi caso celebro la navidad porque me parece precioso dedicar unos días al año para recordar el nacimiento de Dios hecho Hombre e intentar negarle esa celebración bajo mi punto de vista seguro que le agrada bastante menos.

Así que no llames costumbre popular a unos días que le son dedicados a Dios porque serías tú el que te pones en contra de darle ese ofrecimiento.