Jesucristo no cumplió sino que abolió, las leyes del Viejo Testamento que faltaban a la misericordia, como las leyes que mandaban matar a pedradas a las personas por diversas causas. Acuérdate de lo que Jesucristo dijo a los fariseos que preguntaron a Jesús: sobre la ley que ellos llamaban de Moisés:
Juan 8:3-11
...Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?...
...Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella...
...Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio. Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.