Jesucristo no dejó nada, ni tampoco abolió nada.
Jesucristo es un personaje de ficción creado por Pablo.
Eso es todo.
Fue el propio Jesús el que dijo que Él l era el Cristo. Y Él nos enseñó los verdaderos mandamientos de Dios y abolió del viejo testamento todo lo que eran preceptosos de hombres.