Iniciado por
Roberto0
Lo tuyo con la sangre es sospechoso. Pero te seguiremos recordando que tienes que recordar predicar y guardar los misericordiosos mandamientos escritos en el Evangelio, esto es el pacto.
La sangre de Jesús nos salva
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)