Oigo gruñidos, grugru ... Lo siento, no hablo cerdiano.
Oigo gruñidos, grugru ... Lo siento, no hablo cerdiano.
2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.
"Esta gente solo son unos payasos, y es por eso que debemos tener en cuenta lo que la Biblia aconseja sobre no tirarle perlas a los cerdos".
Una demostración que no sigues los consejos de la Biblia.
Siempre intervienes y tiras “tus perlas” cuando hablan personas que no piensan como tú.
La Verdad nos hará libres.
Yo no voy a suavizar el mensaje de la biblia a los no creyentes para agradaros tomas,siempre os responderé bíblicamente. A mí lo que no me sorprende es que haya tanto "espabilao" que se cree despierto,que no "está en la edad de bronce y no comen "chuletas" pues en cuanto a esto ya está escrito en la Biblia.
Jesús no suavizó el mensaje cuando estuvo en la tierra,los cristianos del primer siglo tampoco, y los Testigos cristianos de Jehová en el tiempo del fín de este mundo gobernado por el Diablo tampoco.
Ahora llegó el tiempo en el Dios mediante su Hijo pondrá fin a este sistema. "El reino del mundo ha llegado a ser el Reino de nuestro Señor y de su Cristo, y él reinará para siempre jamás" Apocalipsis 11:17
Lo que está clarísimo es que...."Tampoco echen sus perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, se vuelvan contra ustedes y los hagan pedazos".
Aquí encontramos a unas cuantas personas que no aprecian las perlas espirituales de la Biblia.
El tirar perlas literales delante de los puercos sería otra cosa muy impropia. Los puercos probablemente confundirían las perlas con guisantes, bellotas y otras cosas que estuvieran acostumbrados a comer. Al no poder comerse las perlas, los cerdos las pisotearían, y, al encolerizarse, pudieran causar daño al que les hubiera lanzado las perlas. Esto es lo que ocurre con las personas que valoran la Palabra del Creador.