
Iniciado por
tomas0402
“Santa Catalina vendió la corona heredada, joya de inmenso valor, y con el dinero obtenido encargó numerosas misas para el sufragio del alma de su cuñada.”
(Vallejo-Nágera, María. Entre el Cielo y la Tierra)
¿A que no adivinan ustedes quién se llevó el inmenso valor de la corona vendida?
¡Cierto, los curas!