Cita Iniciado por KIMO Ver Mensaje
La ley del “ojo por ojo”
formaba parte de las leyes que Dios dio a los israelitas mediante Moisés.
Jesucristo abolió las leyes que mandaba ojo por ojo y diente por diente. Y la abolió porque no era Ley de Dios, pues Jesucristo no vino a abolir la verdadera ley de Dios, sino a darla a conocer plenamente.