
Iniciado por
Elisabet*
Eso de que si un niño muere antes de nacer o una persona nace ciega es porque heredaron el pecado de Adán, no lo enseña el Evangelio. Es un invento de las religiones.
Jesucristo explica que el hombre ciego que Él sanó no nació ciego para que las obras de Dios se manifiesten en él, y NO porque pecó el hombre ni sus padres ni porque había heredado el pecado de Adan,
Juan 9:1 Al pasar Jesús, vio a un hombre ciego de nacimiento.
9:2 Y le preguntaron sus discípulos, diciendo: Rabí, ¿quién pecó, éste o sus padres, para que haya nacido ciego?
9:3 Respondió Jesús: No es que pecó éste, ni sus padres, sino para que las obras de Dios se manifiesten en él
Entonces, no se deben enseñar cosas que no enseña el Evangelio.
Lo que SÍ enseña el Evangelio es que los hombres no tenían pecado antes de que Jesucristo viniera y les hablara. Pero después de que Jesucristo vino y les habló, ya no tienen excusa por su pecado, pues Jesucristo dijo:
Juan 15:22
Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa por su pecado.
Y es que antes de que Jesucristo viniera y hablara a los hombres, el pueblo estaba en tinieblas porque no conocía los verdaderos mandamientos de Dios, por eso no eran culpables del pecado o error de seguir mandatos del Viejo Testamento que no eran de Dios, sino de hombres, pues la Ley de Dios había sido cambiada en mentira por la pluma mentirosa de los escribas, como nos dice Jeremías 8:7-8.
Pero después de que Jesucristo vino y enseñó los mandamientos del Evangelio que se deben guardar para entrar en la vida, que son los mandamientos que realmente había dado Dios a Moisés, los que no los guardan cometen pecado y ya no tienen excusa por su pecado, porque ahora ya conocen los mandamientos que realmente había dado Dios a Moisés, que son los mandamientos del Evangelio y son los mandamientos del Nuevo Pacto.
Por eso la sangre Jesucristo en la sangre del Nuevo Pacto, porque Jesucristo dio su vida por enseñarnos los mandamientos del Nuevo Pacto, que son los mandamientos del Evangelio y son los mandamientos que realmente habla dado Dios a Moisés, pues Dios no había dado los mandatos del Viejo Testamento que ordenaban a los hombres imponer penas de muerte, guerras, genocidios, sacrificios ni esclavitud.
Todos esos mandatos del Viejo Testamento que faltaban a la misericordia fueron abolidos por Jesucristo porque no eran de Dios, pues Jesucristo no vino a abolir la verdadera Ley de Dios, sino a darla a conocer plenamente.