Los cristianos verdaderos no adoramos una cualidad llamada "deidad". Adoramos a una persona que ocupa la posición de Soberano Universal ... Su nombre es JEHOVÁ, y es el Padre, y también el DIOS de nuestro Señor Jesucristo:


Apoc. 3:12 ”’Al que venza lo haré columna en el templo de mi Dios, y ya nunca saldrá de ahí. Sobre él escribiré el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad de mi Dios —la Nueva Jerusalén que baja del cielo, desde donde está mi Dios— y mi nuevo nombre.