Plutarco Elías Calles representó este viraje decisivo de renuncia por la república democrática en pos de un Estado paternalista que se consolidará en el cardenismo. el actual gobierno mexicano es una especie de neocardenismo orientado y adaptado a los periodos del estado como entidad reguladora. Si Calles se había despedido en los momentos previos de la crisis de 1929 y los sistemas liberales; Amlo regresa en medio del fin de los gobiernos liberales de principios del siglo XXI, en México. La experiencia de gobiernos liberales ha sido corta y funesta.

El siguiente enfrentamiento de los gobiernos revolucionarios en 1924 fue con la institución más articulada desde la colonia, la verdadera herencia hispánica que quedaba. No en balde esa institución reivindicaba el hispanismo, más tarde a la falange, contra la construcción de un estado liberal que suprime con tradición laica la enseñanza de la religión en las escuelas y la separación entre la Iglesia y el Estado. Un principio básico de la legitimidad sobre la que se funda el Estado mexicano.