Como veo que este escrito colgado en el hilo: ¿Es la religión una adicción? pega bien aqui, ahí lo dejo:

Diferencias substanciales entre ateos y creyentes.

Visto desde un punto de vista psicológico, como el ateo no se ha cargado de cadenas que priven su libertad, puede escoger entre ser: auto, barco o avión, para mejor explorar los paisajes que le convengan.

El creyente, que si va por el mundo cargado de cadenas hasta arriba, ha escogido ser tren, lo cual sólo puede transitar por un único medio y seguir el itinerario diseñado por los dueños del ferrocarril. Eso si, haciéndo uso de su libertad, el recorrido puede repetirlo hasta la saciedad...

Es decir: El ateo tiene posiblidad de conocer gran parte de este vasto mundo, mientras que el creyente debe de contentarse con hacer siempre el mismo recorrido monótono que comporta su reducido mundo.

Conclusión: Al ser la felicidad relativa y subjetiva, ambos pueden encontrarla. Los primeros en un vasto mundo lleno de posibilidades, y los segundos en un pequeñísimo mundo con posibilidades muy reducidas.