Cita Iniciado por misericordia Ver Mensaje
Para los verdaderos cristianos no es ningún problema guardar los misericordiosos mandamientos de Jesucristo:

""Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos""...

Y es que el Evangelio nos enseña los verdaderos mandamientos de Dios... Mandamientos de Dios que dejaron abolidos todos los preceptos de los hombres escritos en el viejo testamento judío de las biblias... Jesucristo abolió muchos preceptos de las biblias (del viejo testamento judío) porque aquellos preceptos solo eran preceptos de hombres..., preceptos de hombres que mandaban penas de muerte, guerras y genocidios donde se mataban a hombres, mujeres y niños...


Todo aquello lo abolió el Señor... Así que no se debe llamar mandamientos de Dios a todos los preceptos escritos en las biblias impuestas por los poderosos de Roma y que Jesucristo abolio...
Cita Iniciado por KIMO Ver Mensaje
...debemos enseñar
Este mandato también

Mateo 26:28
Nueva Biblia Viva
porque esto es mi sangre que sella el nuevo pacto.
Mi sangre se derramará para perdonar con ella
los pecados de infinidad de personas...

La sangre de Jesús es la sangre del Nuevo Pacto porque Jesús dio su vida para enseñar los mandamientos del Nuevo Pacto, que son los mandamientos que Jesús nos enseñó cuando predicó el Evangelio, que dejaron anulados los mandatos del Antiguo Testamento que solo eran mandatos de hombres, mandatos que ordenaban a los hombres esclavitud, sacrificios, penas de muerte, guerras y masacres de pueblos enteros.

Los mandamientos que Jesús nos enseña en el Evangelio son los que realmente había dado Dios desde siempre y para siempre, por eso Jesús era la Luz que luce en las tinieblas y que daba vista a los ciegos que estaban confundidos con muchos mandatos de muerte del Antiguo Testamento. Pero los mandamientos que Jesús enseñó no los aceptaron los fariseos, pues ellos tenían como si fueran mandamientos de Dios todos los mandatos del Antiguo Testamento que Jesús había anulado con sus enseñanzas del Evangelio. Por eso Jesús dijo:

Juan 9:39
Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo; para que los que no ven, vean, y los que ven, sean cegados.
9:40 Entonces algunos de los fariseos que estaban con él, al oír esto, le dijeron: ¿Acaso nosotros somos también ciegos?
9:41 Jesús les respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora, porque decís: Vemos, vuestro pecado permanece.

Entonces, el pecado es no aceptar los mandamientos de Jesús y seguir teniendo como si fueran mandamientos de Dios los mandatos del Antiguo Testamento que Jesús anuló.