Cita Iniciado por tomas0402 Ver Mensaje
“Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. 40 Y respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en la misma condenación? 41 Y nosotros, la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; pero éste ningún mal hizo. 42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso”. (Lucas 23:39-43)

“También le insultaban los ladrones que estaban crucificados
con él”. (Mateo 27:44)

¿Así se ve más clara la discrepancia?
Aquí hay una contradicción implícita más grave. Bajo el punto de vista de la Ley Romana, Jesús era inocente; pero para los judíos era reo de muerte por haberse proclamado hijo de Dios. También por realizar milagros para demostrar su verdad. Así lo ordena el Deuteronomio 13-2-5:

13 Cuando se levantare en medio de ti profeta, o soñador de sueños, y te anunciare señal o prodigios, 2 y si se cumpliere la señal o prodigio que él te anunció, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos, que no conociste, y sirvámosles; 3 no darás oído a las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños; porque Jehová vuestro Dios os está probando, para saber si amáis a Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma.
4 En pos de Jehová vuestro Dios andaréis; a él temeréis, guardaréis sus mandamientos y escucharéis su voz, a él serviréis, y a él seguiréis. 5 Tal profeta o soñador de sueños ha de ser muerto, por cuanto aconsejó rebelión contra Jehová vuestro Dios que te sacó de tierra de Egipto y te rescató de casa de servidumbre, y trató de apartarte del camino por el cual Jehová tu Dios te mandó que anduvieses; y así quitarás el mal de en medio de ti.

Luego ordena matar a tal profeta o soñador de sueños. Si el buen ladrón era judío, en modo alguno se atrevería a negar el mandato del Deuteronomio. Todo lo contrario, creería un mérito ante Dios el criticar y despreciar a alguien que era condenado por blasfemo por los miembros del Sanedrin. Si el buen ladrón era romano o de cualquier otra religión, el hecho de creer que Jesús iba a un reino suyo, en lugar de morirse dentro de unas horas, lo hace más profeta y creyente que el mismo Pedro que lo negó tres veces en ese episodio.

Es esa una contradicción psicológica casi tan grande como la de Juan el Bautista. En el evangelio de Marcos, bautiza a Jesús y se aparece el Espíritu Santo proclamando: Este mis hijo muy amado en el que me he complacido. A los pocos días envía a sus discípulos a preguntarle si era él el que tenía que venir. ¿Acaso no confiaba en que el Espíritu Santo hubiera dicho la verdad? ¿Es que que algo tan estridente como que a alguien se le aparezca y le hable el Espíritu Santo tiene tan poca importancia que se le olvida a los pocos días y lo toma tan poco en serio que no se lo cuenta a sus discípulos?