Antes no sabía lo que tú creías. Ahora veo que tú no aceptas los testimonios de las Escrituras que nos enseñan que Jesús es Dios que se hizo hombre y nos enseñó los mandamientos que realmente fueron dados por Dios desde siempre y para siempre y anuló del Antiguo Testamento todos los mandatos que faltaban a la misericordia y que no eran más que mandatos de hombres, mandatos que ordenaban a los hombres hacer sacrificios, guerras y masacres de pueblos enteros.