Muy buen video Gabin. Tiene mucho sentido lo que dice y he de confesar que concuerdo con muchas de sus ideas. No conocía esa faceta sarcástica de G. Maestro como cuando habla de la cultura y que esta se ocupa de cualquier cosa.
En esta serie de respuestas que realiza, más que una crítica a la iglesia católica o la religión, encuentro una crítica severa y un ataque casi frontal a la filosofía postmoderna. Claro, quien lo dirige a esas críticas son las preguntas que le realizaron, pero -me imagino-, que precisamente le hicieron esas preguntas por las constantes críticas y desacuerdos que tiene Jesús G. Maestro con el postmodernismo. De allí que resalte la superioridad de la razón sobre los sentimientos para entender la realidad y poder vivir: "...considerar que los sentimientos están por encima de los hechos racionales es ser infantil..." se le escucha decir, siendo esto una clara alusión, por ejemplo, a la discusión sobre los géneros que se tiene actualmente, en el que el postmodernismo da por válido un género por solo sentirlo, o como dicen ellos, porque "así se perciben". Por ello también dice: "...la razón no solo no reprime, es reprimida por ideologías...", como ocurre con el postmodernismo, donde se enarbolan teorías poco fundamentadas y criticadas duramente por carecer de rigor en sus estudios. Y así sucede actualmente, donde, por ideología y apoyados de "gramscismo", quieren eliminar postulados de la biología, de la psicología o de la sociología solo porque un ideólogo -como J. Butler por ejemplo- contraviene con estudios carentes de sistematización y profundidad. De allí su mención: "...la ciencia no cambia cuando cambian las ideologías...".
Y esa crítica continúa por todo el video, y critica esa sustitución de la ciencia por la cultura ya que esta última puede llevar a dogmas por derroteros oscuros y equivocados al carecer de razón y da ejemplos como el de la ablación del clítoris o el de distinguir a los seres humanos a partir de los morfemas "o" y "a", cosa que actualmente se discute con aquello del lenguaje inclusivo. Es donde mete el mordaz comentario de que confunden que es lo mismo "cargo político" que "carga política". Remata diciendo: "...como si los problemas de discriminación fueran problemas lingüísticos...".
Pero no olvida a Derrida y su "no hay nada fuera del texto", ni a Foucault ni a Lacan. De allí a esa mención de que la ciencia no es un lengüaje y de que la realidad no está formada de palabras.
Casi al finalizar, habla sobre que la ciencia rebasa la voluntad del individuo y del gremio, destacando la pérdida de la individualidad por pertenecer a un gremio en el que "adopta" la supuesta identidad del gremio, creyéndose así la persona, lo que no es. Es cuando el individuo se considera bueno o malo por pertenecer a una cultura o gremio, cuando en realidad es por los actos individuales. Pero, -añado yo-, en estos tiempos de gremialización o colectivización, calificamos a estos en "buenos" o "malos", en "opresores" y "oprimidos". Y aquél que no se considera dentro de un gremio, lo involucramos en uno para categorizarlo: el es un hombre individual, lo involucramos al "colectivo de los hombres" y lo categorizamos como "opresor", sin más, por ejemplo. Y de allí que, al estar colectivizado y categorizado, surjan leyes como la ley de violencia de género española donde los "únicos capaces de ejercer ese tipo de violencia es el gremio de los hombres". Ya no somos responsables de nuestros actos individuales, sino de los actos del colectivo al que nos incluyeron.
Última edición por parzival; 03-mar.-2019 a las 10:57
"La comprensión de que la vida es absurda no puede ser un fin, sino un comienzo".
Albert Camus