En realidad, Yahvéh estuvo coexistiendo con otros dioses, durante siglos.
Los partidarios de Yahvéh atribuían las derrotas de los hebreos a celos de Yahvéh porque los judíos habían adorado a otros dioses.
Los partidarios de otros dioses creían lo opuesto.
Pero la lógica nos dice que sus rivales los dominaban por la sencilla razón de que eran muy superiores a ellos.![]()