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KIMO
Pero el apóstol Pedro no solo anima al cristiano a honrar a su mujer. También le advierte que, si no lo hace, corre el riesgo de que “sus oraciones sean estorbadas”
(1 Ped. 3:7).
Estas palabras destacan la importancia que concede Jehová a que se trate bien a la esposa. Si el marido no actúa así, sus oraciones podrían ser rechazadas.
Además, si le demuestra que la estima, ella seguramente se sentirá más feliz y estará más dispuesta a cooperar con él.
Así es, hermano. Y esas palabras son tan ciertas como que Pedro era un hermano casado.
Se le ha repetido decenas de veces al trío del evangelio de la fornicación, y ellos siguen diciendo que "los que se casan no son dignos del reino de Dios" ... haciendo a Pedro un pecador indigno de estar junto a Jesús en los cielos.
Ellos dicen que Pedro es pecador porque estaba casado ... y ellos son justos porque se reparten sexo libre entre sí sin estar casados. Miren por dónde el engañador le entra a los que desean vivir en vicios sexuales, que hasta difaman de los propios apóstoles de Cristo y no se dán cuenta.
2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.