Porque 25

Usted cree en lo que usted estima que es misericordioso, y usted no es el juez que decide que es misericordioso y lo que no es misericordioso pues usted es imperfecto y no esta calificado para juzgar eso.

Los cristianos como nos enseño Jesús creemos que la biblia es la palabra de Jehova Dios, inspirada por el creador, prueba de eso son las profecías que en esta existe que se han cumplido en la antigüedad.

43 Así que Jehová dio a Israel toda la tierra que había jurado dar a sus antepasados, y ellos procedieron a tomar posesión de ella y a morar en ella. 44 Además, Jehová les dio descanso todo en derredor, conforme a todo lo que había jurado a sus antepasados, y ni siquiera uno de todos sus enemigos se mantuvo de pie delante de ellos. Todos sus enemigos los dio Jehová en manos de ellos. 45 No falló ni una promesa de toda la buena promesa que Jehová había hecho a la casa de Israel; todo se realizó.
Jos 21:43-45

“no solo de pan vive el hombre, sino que de toda expresión de la boca de Jehová vive el hombre”. (Dt 8:3; Mt 4:4.)


“La palabra de Dios es viva, y ejerce poder, y es más aguda que toda espada de dos filos, y penetra hasta dividir entre alma y espíritu, y entre coyunturas y su tuétano, y puede discernir pensamientos e intenciones del corazón”.
(Heb 4:12.)


Jesus dijo que la palabra de su Dios es la verdad:
15 ”Te solicito, no que los saques del mundo, sino que los vigiles a causa del inicuo. 16 Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo. 17 Santifícalos por medio de la verdad; tu palabra es la verdad.
JUAN 17:15-17

Él hizo la boca de Isaías “como una espada aguda”, y las palabras de la boca de Jeremías, como “un fuego”. Jehová respaldó las palabras proféticas de estos hombres con su poder, y se cumplieron. (Isa 49:2; Jer 5:14.)

10 Porque tal como la lluvia fuerte desciende, y la nieve, desde los cielos, y no vuelve a ese lugar, a menos que realmente sature la tierra y la haga producir y brotar, y realmente se dé semilla al sembrador y pan al que come, 11 así resultará ser mi palabra que sale de mi boca. No volverá a mí sin resultados, sino que ciertamente hará aquello en que me he deleitado, y tendrá éxito seguro en aquello para lo cual la he enviado.
Isaías 55:10, 11