Jesús predico el reino y nos advirtió a estar atentos a su venida, ese día destruirá a los gobiernos y establecerá el reino de Dios que gobernara la tierra.

Noé es la primera persona a la que se llama “predicador” (2Pe 2:5), aunque la actividad profética que anteriormente había llevado a cabo Enoc puede que implicara cierta predicación. (Jud 14,*15.) La predicación de justicia que Noé hizo antes del Diluvio probablemente incluyó una llamada al arrepentimiento y una advertencia de la destrucción venidera, como se desprende del comentario de Jesús en cuanto a que las personas “no*hicieron caso”. (Mt 24:38,*39.) Por consiguiente, la proclamación pública que Noé efectuó con la autorización divina no*fue principalmente un mensaje de buenas nuevas.