Cita Iniciado por expanium Ver Mensaje
porque25

Qué tiene que ver el texto que citas con el matrimonio:

"... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7 )
Vosotros queréis que las mujeres se entreguen a los hombres en matrimonio como esclavas, y eso pasa a ser un sacrificio insoportable para muchas mujeres, porque cuando pasa la fiesta de bodas y las mujeres conocen a los hombres que las dominan y las amenazan, entonces aquel día se arrepienten de haberse entregado en propiedad a hombres violentos que las amenazan de muerte. Y las amenazan de muerte porque no saben que lo que Dios quiere es misericordia y que no quiere sacrificios.

Ahora podrás comprobar que sí tiene relación el texto que pongo con los matrimonios del mundo.


Y por cierto que la Biblia condena tu Evangelio de la Fornicación:.....
Sólo hay un Evangelio: el de Jesucristo. Entonces, eres tú el que sigue doctrinas de fornicación..., tú, que no obedeces lo que te manda el Evangelio, pues el Evangelio te dice que los que son dignos del reino de Dios, "ni se casan ni se dan en matrimonio". Y tú desobedeces el mandamiento de Jesucristo y dices que hay que casarse.

Las personas pueden vivir juntas y hacer familias según las costumbres de los pueblos, pero casarse con ritos religiosos judaizantes de esclavitud para las mujeres, está en contra de lo que Jesucristo manda:

"ni se casan ni se dan en matrimonio".

Te dice Pablo:

"no obstante, a causa de la ocurrencia común de la fornicación, que cada hombre tenga su propia mujer y que cada mujer tenga su propio varón."
(1 Corintios 7:2)


Y el mismo Pablo que te dice eso, también te dice quién es la mujer y quién es el varón:

"Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia. (Efesios 5:32)

"Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo". (2ª Corintios 11:1-2)