
Iniciado por
María_Laura3
Lo que dices de los testigos de Jehová se queda corto porque no has tenido en cuenta lo peor: que han traducido sus biblias como les ha parecido, sin respetar lo que dicen los textos griegos, y todo con la intención de hacer ver que Jesucristo no es Dios.
Y aparte de eso, ellos, como todas las religiones que dicen ser cristianas, llaman "mandamientos de Dios" a los mandatos del Antiguo Testamento que no eran del agrado de Jesús, pues faltaban a la misericordia y Jesús lo anuló porque sólo eran mandatos de hombres, no de Dios.
Y también, como todas las eligiones que dicen ser cristianas, llaman "palabra de Dios" a los preceptos escritos en la cartas atribuidas a Pablo que no coinciden con los mandamientos del Evangelio. Todo lo que no coincide con lo que Jesús enseñó cuando predicó el Evangelio, no es de Dios, pero los testigos de Jehová, así como muchas religiones que se llaman cristianas, lo llaman a todo "palabra de Dios".
Lo que verdaderamente predicó Pablo es lo que enseña en el Evangelio, porque Pablo enseñó que no había que creer en doctrinas diferentes al Evangelio de Jesucristo. Entonces, los preceptos que hay escritos en las cartas que no coincide con el Evangelio, Pablo nos advirtió que no los siguiéramos, pues dijo así:
Gálatas 1:6
Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.
1:7 No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo.
1:8 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.
1:9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema
Y es que las cartas de Pablo fueron torcidas ya desde el primer siglo, como nos dice el apóstol Pedro:
Pedro 3:15
Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito,
3:16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.
3:17 Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza.
3:18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.
Con sus palabras, Pedro nos aconseja que debemos ajustarnos a lo que Jesús nos enseñó cuando predicó el Evangelio, para que ningún escrito ni nadie nos confunda.